El consejero electoral Marco Antonio Baños Martínez rechazó ayer que la relación entre el Instituto Nacional Electoral (INE) y el Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación (TEPJF) haya quedado abollada tras las diferencias que tuvieron sobre el reglamento de elecciones y sus repercusiones en el conteo rápido que se efectuará para conocer las tendencias en los resultados de los comicios presidenciales.

La relación con el tribunal es buena y saludable, aseguró. Estamos trabajando con ellos y ellos con nosotros, puntualizó.

El jueves, el magistrado José Luis Vargas consideró que en esta polémica el INE generó un clima de alarma, al estimar que el fallo del tribunal sobre el reglamento retrasaría hasta la madrugada los resultados del cónteo rapido. Sumado a ello, se extralimito en sus funciones con la aprobación de cambios que alteraban la norma sustantiva del proceso, resaltó.

Baños Martínez señaló que se vale que cada quien diga lo que considere pertinente en un esquema en el que el INE emite acuerdos y el tribunal puede revisarlos si son impugnados.

La consejera Pamela San Martín dijo no compartir que el instituto se haya extralimitado. Sin embargo, la sentencia de la sala superior del tribunal es definitiva y en esos terminos se acata.

Indicó que se ha buscado un mecanismo que permita garantizar los derechos de los ciudadanos y uno de ellos es el derecho a la información”, apuntó.

Luego que los consejeros decidieron realizar cambios a los cuadernillos de cómputo de las urnas, para lograr que los resultados se conozcan a más tardar a las 11 de la noche del primero de julio, el consejero Baños Martínez explicó que se trabaja para que el nuevo acuerdo goce del consenso de los partidos políticos y, de ser necesario, el respaldo del tribunal.