El club Santos no quiere dinero público, pero asegura su tajada
lejandro Irarragorri –integrante del llamado Comité de Desarrollo Deportivo (de la Federación Mexicana de Futbol, FMF)–, quien pretendía eliminar el ascenso y el descenso, se mostró molesto al ver el rechazo de una idea que ni siquiera había expuesto de forma oficial. Dijo que es lamentable y perverso que existan filtraciones manipuladas
, y aclaró que lo que él busca es el desarrollo
del balompié.
En realidad no fue una filtración, hubo declaraciones precisas, como las de Javier San Román, su socio en el Tampico Madero, quien incluso dejó el cargo como directivo de la Jaiba Brava al no estar de acuerdo con lo que planeaba impulsar Irarragorri, también presidente y propietario del Santos Laguna.
A toro pasado, cuando el repudio a la propuesta era abrumador y generalizado, Yon de Luisa, directivo del América, y Decio de María, titular de la FMF, se manifestaron en contra de suspender el ascenso-descenso. Esta vez Decio no pudo apoyar los proyectos de su amigo, como seguramente deseaba. No se explica de otra forma su silencio inicial.
En su perorata justificadora, Irarragorri puntualizó que en el futbol organizado necesitamos asegurarnos de que no exista dinero preponderante del gobierno
y que haya buenos inversionistas
en los equipos. Esta vez fue tan claro que no dejó lugar a dudas, sobre todo porque enseguida puso manos a la obra.
Por conducto de su empresa Orlegi, Alejandro pactó con el gobierno de Coahuila boletos para los partidos de los albiverdes; a cambio, no pagará impuesto predial, ni por los anuncios espectaculares y tendrá refrendo de licencia para vender bebidas alcohólicas. Además, pagará la mitad por derecho para seguridad pública... Así, Irarragorri hace negocios sin dinero preponderante
del gobierno.
Si Pumas y Lobos pueden sobrevivir en el máximo circuito con decoro, significa que una buena organización y administración haría viable al resto de los equipos. La FMF se indignó porque el equipo de la Benemérita Universidad Autónoma de Puebla boteó el torneo pasado para obtener recursos. En todo caso es mejor conseguir donativos de la comunidad universitaria, o de un patronato, que arrancarlos del gobierno al estilo Irarragorri.
Culpa de la FMF es que haya clubes como Murciélagos, de Los Mochis. El equipo sobrevivió esta semana virtualmente de la caridad; se hospedó, trasladó a Zacatecas y comió gracias a dádivas. Si los federativos no pueden exigir garantías e indagar acerca de la solvencia de los dueños, que renuncien. Además, toca a la federación garantizar pagos y viáticos a un plantel dejado a la deriva.
Aunque la esperanza muere al último, no habrá quinto Mundial para Rafael Márquez. La Procuraduría General de la República y el Departamento del Tesoro estadunidense mantienen abiertas las investigaciones contra el zaguero michoacano por operar empresas con recursos ilegales. Apenas le han permitido sufragar gastos básicos. Es decir, Rafa sigue con la soga al cuello.
La Máquina no despega. Pedro Caixinha no llegó con la varita mágica y el rostro del entrenador luso es serio, triste, amargo. Casi con fanfarrias firmó contrato por tres años y tras apenas dos meses ya escucha el ¡fuera Caixinha!
El sábado ni siquiera tuvo a su lado al lesionado Carlos Gullit Peña para repartir mentadas, silbidos y abucheos.
Tal parece que el destino de todos los estrategas del cuadro celeste –mexicanos y foráneos– es cargar una pesada cruz de cemento y vivir un intenso calvario. El mal, no hay duda, está en la administración del club. Igual que Tv Azteca, que fracasó con el Veracruz, iba bien con el Morelia, pero lo relegó en pos de un Atlas que coquetea con el descenso.
Las Chivas son otro equipo atribulado, pues consiguió un penoso empate ante Tuzos que lo mantiene en la zona baja de la tabla. Oswaldo Alanís ya hizo maletas y está con un pie en el avión rumbo a Europa; sin embargo, no se irá como jugador libre: algo logró arrancarle la directiva rojiblanca que tendrá una rebanada del pastel.
El Necaxa de Ignacio Ambriz lleva cinco partidos sin derrota y escala posiciones. André-Pierre Gignac declaró su afecto a Tigres, a México y prometió colgar los botines con el cuadro de la Universidad Autónoma de Nuevo León; incluso, aprovechó que Tuca Ferretti ya puso fecha a su retiro para externar su intención de ser entrenador. Su mejor acto de amor fue el doblete del sábado.