El representante en México de la Oficina del Alto Comisionado de las Naciones Unidas para los Derechos Humanos, Jan Jarab, asistirá mañana a Atenco para reunirse con los pobladores afectados por la construcción del Nuevo Aeropuerto Internacional de la Ciudad de México (NAICM) en terrenos del antiguo lago de Texcoco.

Ignacio del Valle, del Frente de Pueblos en Defensa de la Tierra (FPDT), señaló que, además del proyecto en Atenco abordarán asuntos organizados en ocho ejes temáticos, como megaproyectos, saqueo territorial, pueblos indígenas, violencia contra mujeres y feminicidio, sistemas comunitarios de agua, educación, criminalización, vivienda digna y medio ambiente, sin dejar de lado el tema de los presos políticos.

En conferencia, los integrantes del FPDT denunciaron la cerrazón de los tres niveles de gobierno a su petición de suspender el megaproyecto: “Queremos que lo cancelen e incluso retrocedan en la construcción de carreteras que dividen nuestros ejidos y tierras comunales. Que busquen otras opciones, con las que no impongan a los pueblos un negocio que sólo traerá retroceso en todos los sentidos a una vida digna.

Hemos buscado diálogo que tenga facultad de decisiones, capacidad para encontrar la seguridad y que solucione un conflicto en el que autoridades e instituciones se han empeñado en defender un aeropuerto que encierra intereses y perpetuidad de poder.

Sandino Rivero, representante legal del frente, expresó que el 18 de enero el segundo tribunal colegiado del segundo circuito resolvió el recurso de revisión 383/2017, interpuesto contra la sentencia de la juez novena de distrito con sede en Nezahualcóyotl, quien negó el amparo contra la edificación del NAICM.

La impartidora de justicia ordenó que se amplíe la prueba pericial en antropología a fin de verificar si los residentes son pueblos originarios, para determinar si pueden aplicarse los derechos fundamentales previstos en el artículo 2 de la Constitución.

La juez de amparo recabará de oficio la prueba pericial en topografía, para comprobar si son vecinos de la zona donde se lleva a cabo la contratación, y una vez que se haya determinado, se practique la prueba pericial en materia de medio ambiente para resolver si los derechos que defienden se encuentran afectados.

De acuerdo con el FPDT, la construcción de la nueva terminal aérea está dañando el patrimonio, la identidad y la cultura de comunidades, ejidos y pueblos originarios.