Milán.

Tres personas murieron y más de cien resultaron heridas, 12 de gravedad, cuando un tren descarriló este jueves cerca de esta ciudad italiana, informaron los servicios de rescate.

El descarrilamiento ocurrió cerca de las siete de la mañana (hora local) en los alrededores de Milán, en el norte de Italia, precisó Cristina Corbetta, responsable regional de los servicios de socorro a la cadena Sky TG24.

Uno de los convoyes quedó atravesado en las vías, y los bomberos, así como los servicios de socorro tuvieron que trabajar durante horas para cortar los hierros retorcidos y sacar a los pasajeros atrapados.

Las tres víctimas mortales eran mujeres. Los heridos más graves recibieron atención a unos metros del lugar del accidente.

Según un directivo de la Red Ferroviaria Italiana, el accidente podría deberse a la rotura de una de las vías, detectada a un kilómetro del lugar del incidente.

Una mujer dijo al diario La Repubblica que su hija la llamó justo en el momento del accidente. ¡Mamá, socorro, el tren está descarrilando!, alcanzó a decirle.

Según los testimonios recogidos por medios informativos italianos, el tren empezó a temblar de repente, como si avanzara sobre piedras. Luego frenó de forma brutal y descarriló.

La fiscalía de Milán ya abrió una investigación.

El accidente ocurrió en los alrededores de Segrate, una de las últimas paradas antes de llegar al centro de Milán. Este tren regional salió de Cremona.

El papa Francisco dijo estar profundamente triste por el accidente y declaró que rezará por las víctimas.

Los pasajeros eran, sobre todo, estudiantes y personas que se dirigía a sus lugares de trabajo en la capital económica italiana.

Este tren, compuesto de seis u ocho vagones, según las fuentes, pertenece a la compañía regional lombarda Trenord, del grupo público Trenitalia y Ferrovie Nord Milano FNM.

Hacia las ocho de la mañana, Trenord informó a los pasajeros sobre la interrupción del servicio por un problema técnico en un tren, lo que provocó fuertes críticas en las redes sociales.

Este accidente ferroviario es el más grave desde el ocurrido en Apulia, en el sur del país, que dejó 23 muertos en julio de 2016.