El Congreso Nacional Indígena (CNI) responsabilizó a los tres niveles de gobierno del ataque del domingo por la tarde, en el que un grupo armado quitó equipo de trabajo –celulares y cámaras– a tres periodistas que iban en la caravana de María de Jesús Patricio, Marichuy, aspirante a una candidatura independiente a la Presidencia de la República, cuando se dirigían a Paracho, Michoacán.

En tanto, Marco Antonio Baños, consejero del Instituto Nacional Electoral (INE), condenó la agresión y señaló que, de solicitarse medidas de protección, el organismo procesaría la petición ante la Secretaría de Gobernación. El país debe tener condiciones de seguridad adecuadas para todos los mexicanos, dijo.

Sin minimizar el suceso, pues es un hecho preocupante, por el entorno en que se generó, se trata de un hecho aislado, ya que hasta ahora el INE no tiene reportes que este tipo de agresiones hayan ocurrido a otros aspirantes o en otras entidades.

En un pronunciamiento leído en conferencia de prensa, el CNI hizo responsables al presidente Enrique Peña Nieto, al gobierno estatal representado por Silvano Aureoles, y al municipal, de lo sucedido, así como de las posibles agresiones que puedan sufrir las comunidades y pueblos indígenas, la caravana del Concejo Indígena de Gobierno (CIG) y periodistas que dan cobertura al caminar del CIG, debido a que durante el recorrido por las comunidades de los pueblos originarios nos hemos cimbrado al escuchar los dolores causados por el crimen organizado en contubernio con los malos gobiernos.

Un hecho como el del domingo puede sucederle a cualquiera de los aspirantes, dijo el CNI y pidió seguridad para transitar por todo el país, señaló el congreso.

En el INE, a pesar de la denuncia pública que hizo la aspirante independiente, el tema no se abordó en la sesión del Consejo General, por lo que el consejero presidente, Lorenzo Córdova sólo emitió un tuit de condena al caso.

Víctor Caballero, del área de difusión del CNI, detalló que luego de ir a Ostula, cuando la caravana se dirigía a Paracho, al salir de los límites del municipio de Tepalcatepec, el último vehículo de la caravana, donde se transportaban los periodistas independientes Daliri Oropeza, Aldabi Olvera y Cristian Rodríguez, el cual iba rezagado, fue detenido por un comando armado, y cuando alcanzaron al resto de los vehículos en la carretera les informaron de lo sucedido.