Martes 9 de enero de 2018, p. 8
En la Cineteca Nacional a partir de este viernes se exhibirá La forma del agua, de Guillermo del Toro. Ambientada en la época de la guerra fría en Estados Unidos, la trama da cuenta de cómo en un laboratorio de alta seguridad del gobierno está en cautiverio un ser monstruoso, de dos patas, una cola y dos brazos.
Ahí trabaja la solitaria Elisa (Sally Hawkins), quien es muda, y al lado de Zelda (Octavia Spencer) y descubre el experimento como secreto.
Entre escenas de acción y romance, la cinta ofrece al espectador una historia de amor, en la que las diferencias físicas del otro no importan y donde el acto sexual no se observa con morbo.
Del Toro, ganador del León de Oro en Venecia, y el Globo de Oro por mejor director, dijo: “Quería crear una historia bella y elegante acerca de la esperanza y la redención, como un antídoto ante el cinismo de nuestros tiempos. Quería que esta historia tomara la forma de un cuento de hadas en cuanto a que tienes un ser humano humilde que se topa con algo más grande y trascendental que cualquier cosa en su vida.
“Después me pareció que sería una gran idea yuxtaponer ese amor contra algo tan banal y malvado como el odio entre naciones, que es la guerra fría, y el odio entre la gente debido a la raza, el color, la capacidad o el género”, expuso al presentar la cinta en la 15 edición del Festival Internacional de Cine de Morelia.