El precandidato del Partido Revolucionario Institucional (PRI) a la jefatura de Gobierno de la Ciudad de México, Mikel Arriola Peñalosa, afirmó que aceptaron firmar el pacto de civilidad que promovieron las autoridades capitalinas, pero que, en su opinión, es una “acción redundante.

Los partidos tienen como objetivo primero la civilidad. No tenemos que estar reiterándolo, sino predicar con el ejemplo, expresó, y señaló que la negativa de Morena a suscribirlo obedece a que se ha convertido en el partido del ‘no’.

Llevamos ya muchos años observando que todo lo que se plantea, los dirigentes de ese partido dicen no a todo. Por ejemplo: no al aeropuerto internacional, no a la reforma energética, no a la reforma educativa, por lo que deja de sorprender que se opongan a las acciones que beneficien a la sociedad y mucho menos van a apostar por la civilidad, expresó.

En una gira de trabajo por la delegación Tláhuac, donde se reunió con productores de amaranto, aseguró que representa la opción de la tranquilidad que va a poner orden en la ciudad, que plantea cosas sustantivas y no agresiones.

Arriola se comprometió a solicitar a los legisladores que incorporen el amaranto como cultivo estratégico y tenga las mismas condiciones de comercialización que el maíz; ya vimos que tiene mejores propiedades nutricionales y además lo cultiva la economía social, apuntó.

Antes de iniciar sus actividades, el abanderado del tricolor se dio tiempo para sostener una partida de jai alai (pelota vasca) junto con pelotaris del Frontón México, como parte de su rutina rumbo al campeonato nacional mexicano de ese deporte.