El paro de labores que realizó un grupo de pilotos de Aeromexico hace dos semanas y que afectó a más de 10 mil pasajeros por la cancelación de 62 vuelos, ocasionó pérdidas por 100 millones de pesos a la empresa.

Además de rescindir el contrato de José Manuel Fernández, secretario del Trabajo de la Asociación Sindical de Pilotos Aviadores (ASPA), a seis pilotos que participaron en el paro les suspendieron la licencia de manera temporal. El caso sigue en proceso de investigación por la comisión de honor y justicia de la organización, y antes del 15 de diciembre entregará un dictamen.

Fernando Gómez Suárez, analista del sector, señaló que si el paro hubiera durado más horas el gobierno podría haber interpuesto la figura de la requisa, como lo establece el artículo 77 de la Ley de Aeropuertos. Consideró que el grupo inconforme obstruyó las vías generales de comunicación al no presentarse a cumplir sus labores.

Añadió que la protesta es justa, aunque el sindicato se deslindó, ya que el procedimiento fue unilateral y no consensuado, pero dejó ver lo que pasa en el sector.

En tanto, el titular de la Procuraduría Federal de Consumidor (Profeco), Rogelio Cerda Pérez, recordó que realizaron mil 333 conciliaciones y que en la anterior semana recibieron otras 600 quejas.

Agregó que todavía hay más de 9 mil pasajeros de los que no se tiene evidencia de compensación; por ello, exhortó a los consumidores afectados que aún no han conciliado, a que se acerquen a la institución para ser atendidos, aunque mencionó que Aeromexico también realiza las conciliaciones.

En entrevista por separado, el secretario general de ASPA, Mario Alberto González Aguilera, estimó que la movilización en la que exigían la reinstalación de un compañero despedido de manera injustificada era innecesaria.

No es la primera vez que nos despiden a un piloto. Han sido muchos a lo largo de nuestra historia y con el bufete jurídico que tenemos, que es muy bueno, al poco tiempo son reinstalados. Tenemos un seguro de protección de desempleo. No había ninguna necesidad de hacer este tipo de movimiento con el cual todos fuimos sorprendidos, por eso el sindicato se deslindó de esas acciones.

Mencionó que un día antes del paro, el lunes 27 de noviembre, alrededor de 200 pilotos protestaron contra la iniciativa de senadores del PRI para que se aumentara de 90 a 100 horas su jornada de vuelo mensual y de 180 a 200 las horas de servicio, sin afectar las operaciones aéreas ni a pasajeros.

La gente no tiene la culpa. Un movimiento social lo que menos debe de hacer es meterse con la gente. Ese día marchamos tomados de los brazos. Estuvimos sólo 35 minutos y fue tal el impacto visual que decidieron retirar la iniciativa.