El PRI consideró que Lizandro Núñez Picazo puede estar al frente de la Unidad Técnica de Fiscalización del Instituto Nacional Electoral (INE), encargada de revisar las cuentas de 2018, aunque antes haya estado bajo las órdenes de José Antonio Meade, virtual candidato del tricolor a la Presidencia de la República o del ahora canciller Luis Videgaray.

No vería que generara ruido. Hay gente que ha trabajado muchos años en la administración pública y que no por eso son panistas o priístas. Ha habido funcionarios que me he encontrado en la administración pública que llevan 15 o 20 años y que van escalando profesionalmente, expresó Alejandro Muñoz, representante del tricolor ante el INE.

Núñez Picazo, actual titular de la Administración General de Recaudación del Sistema de Administrador Tributaria (SAT) fue propuesto por el consejero presidente, Lorenzo Córdova, para sustituir a Eduardo Gurza, quien ha sido señalado por PAN, Morena y PRD de haber favorecido al PRI.

Dichos partidos políticos también han rechazado o manifestado sus reservas de que este funcionario del SAT fiscalice las elecciones del próximo año, debido a que fue subordinado del futuro abanderado del tricolor. Él mismo confirmó a este diario que Meade lo propuso para su cargo actual y luego recibió el respaldo de los senadores.

Actualmente los 10 consejeros electorales siguen analizando esta propuesta de Córdova, quien necesita reunir ocho votos para concretar el nombramiento.

Muñoz dio el beneficio de la duda a Núñez Picazo. Mi opinión es que si tiene trayectoria que ha demostrado en su trabajo como funcionario público y ésta ha sido impecable, de responsabilidad, de cumplimiento con sus funciones y si tiene el consenso de los consejeros será él.

Consideró que quien revise las cuentas de 2018 debe garantizar imparcialidad para todos los partidos políticos y certeza para el proceso electoral.

Defendió a Gurza al señalar que no sale por la puerta de atrás. Él ha hecho su mejor esfuerzo. Es una materia nueva que exige mucho y que obviamente iba a tener que desgastarse.

Descartó que este desgaste se haya debido a una actuación imparcial, sino a lo novedosa y compleja que es la fiscalización electoral, pues los propios consejeros tienen criterios muy debatibles entre ellos mismos, y lo mismo pasa en el Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación.

Planteó que, más allá de quién encabece esta área, deberá de ser respetada su autonomía técnica. La unidad pone a consideración de la Comisión de Fiscalización el proyecto y ahí pueden opinar los consejeros si están de acuerdo o no. Pero una cosa es una opinión y otra cosa es una instrucción.

En la última sesión el consejero Marco Antonio Baños defendió a Gurza al señalar que propuso un proyecto que no implicaba el rebase de topes de campaña del ahora gobernador de Coahuila, el priísta Miguel Ángel Riquelme, pero éste se modificó en la comisión, decisión que luego revirtieron los magistrados.