El 9 de diciembre Alejandra Barrales debe dejar la presidencia del PRD
Sábado 2 de diciembre de 2017, p. 10
El Frente Ciudadano por México (FCM) busca llegar a un acuerdo sobre el convenio de coalición electoral antes de que Alejandra Barrales deje la presidencia del Partido de la Revolución Democrática (PRD) el 9 de diciembre próximo, informaron integrantes del sol azteca y de Acción Nacional (PAN), quienes calificaron de intensas las negociaciones que se realizan en estos días para tratar de que en la siguiente semana haya consensos.
Los partidos no sólo deben ponerse de acuerdo en el método que utilizarán para definir a su candidato presidencial, sino también en el número de posiciones que tendrá cada instituto en diputaciones y senadurías.
Ante las versiones de que el lunes podría estar listo el acuerdo de coalición, fuentes de los dos partidos consideraron que eso aún es incierto, pero la intención es tenerlo a más tardar el viernes próximo, porque el PRD tendrá su consejo electivo al día siguiente para renovar la dirigencia del partido, proceso que se ha retrasado por las negociaciones del FCM.
La urgencia por resolver es que Barrales fue designada por el Consejo Nacional como representante para la firma del convenio electoral con PAN y Movimiento Ciudadano (MC). La dirigente es la primera interesada en alcanzar un acuerdo, ya que busca ser candidata a la jefatura de Gobierno de la Ciudad de México. Esto a pesar de las críticas por su patrimonio millonario y por ostentar dos cargos a la vez, en abierta violación a los estatutos del PRD.
Entre los temas que han atorado el acuerdo se encuentra la intención de corrientes perredistas de que sea Miguel Ángel Mancera, jefe del Gobierno capitalino, quien encabece la candidatura presidencial, puesto que reclaman los panistas para Ricardo Anaya.
A esta discusión se agregó la negativa de Enrique Alfaro, alcalde de Guadalajara, a ser abanderado al gobierno de Jalisco por el FCM. Sólo quiere representar a MC.
El reparto de las candidaturas al Congreso sigue siendo otro de los puntos conflictivos, porque el PAN insiste en tener 50 por ciento de los espacios, mientras el PRD quiere 40 por ciento y MC, 25; en el caso de las últimas fuerzas políticas el porcentaje demandado no corresponde con su peso político.