A partir de este jueves se completa la liberalización de precios de los combustibles; sin embargo, la Secretaría de Hacienda y Crédito Público (SHCP) anunció que mantendrá los subsidios fiscales en lo que resta de este año y en 2018 para evitar variaciones abruptas.

El subsecretario de Ingresos, Miguel Messmacher Linartas, descartó que se disparen los precios y recordó que ya en Baja California y Sonora, y después en el resto de la frontera norte, en el centro-norte y, finalmente, este 30 de noviembre en el centro y sur-sureste del país y no hubo alzas desmedidas.

Observamos un comportamiento de precios muy parecido a lo que se veía en el resto del país, entonces, en ese sentido, el público del centro y de la zona sur-sureste, donde se van a liberalizar los precios, puede estar tranquilo de que no esperamos ver ningún disparo de precios, así como no los vimos ni en la frontera ni en el centro y norte del país, refirió.

En lo que va del actual sexenio la gasolina Magna, la de mayor demanda en el país, registra aumento de precio de 55 por ciento, al pasar de un promedio de 10.81 pesos en 2012 a 16.76 pesos por litro ayer 29 de noviembre. En la gasolina Premium el alza ha sido de 62.56 por ciento, al aumentar de 11.37 pesos a 18.48 y el diésel registra incremento acumulado de 57.27 por ciento, al ascender de 11.17 a 17.68 pesos por litro.

Aseguró que para evitar que los grandes grupos de gasolineros se pongan de acuerdo y manipulen el precio de las gasolinas se va a mantener una supervisión permanente por la Comisión Reguladora de Energía (CRE), la Secretaría de Hacienda, y de manera muy importante por la Comisión Federal de Competencia, para asegurar que no haya arreglos oligopólicos.

Las tres instituciones, tanto la Comisión Federal de Competencia Económica, como Hacienda y la Comisión Reguladora de Energía, mantenemos dientes para volver a entrarle a precios, en el caso de que identificáramos que empieza a haber un comportamiento para manipular precios en contra de los consumidores, advirtió.

Messmacher Linartas explicó que el apoyo para evitar cambios abruptos de precios será mediante el impuesto especial sobre producción y servicios (IEPS), que siempre será positivo pero ya no vamos a tener precios máximos de aquí en adelante, pero de todas maneras, durante lo que resta de 2017 y 2018, nosotros vamos a seguir moviendo cada semana el impuesto que aplica a los combustibles para estar suavizando las fluctuaciones internacionales de manera similar, como lo hicimos durante este 2017, es decir, no estaremos cobrando quizás la totalidad del impuesto.

Hacienda publicó ayer en el Diario Oficial de la Federación (DOF) una adecuación a la metodología del cálculo de los estímulos al IEPS, para hacerla consistente con el nuevo entorno de precios liberados.

Estos cambios no modifican la mecánica de cálculo de los estímulos semanales al IEPS.

Además, en el decreto se extiende la vigencia a 2018 tanto del estímulo general como del aplicado en la frontera norte, en los mismos términos. El subsidio en la frontera norte ha permitido homologar parcialmente los precios en esa zona con los de las ciudades vecinas en Estados Unidos.