La fiscal especializada en delitos sexuales de Veracruz, Yendi Guadalupe Torres Castellanos, fue asesinada a balazos la mañana de ayer cuando llegaba a su centro de trabajo en el municipio de Pánuco.

A las 9:00 horas, Torres Castellanos estacionaba su vehículo frente a las instalaciones de la fiscalía, en la calle J. Colorado número 307, colonia Maza, cuando fue atacada. Sin dar detalles, el parte policiaco mencionó que la funcionaria recibió varios tiros y quedó abatida dentro de la unidad.

Torres Castellanos, de 35 años de edad, estudió la licenciatura en derecho en el Instituto de Ciencias y Estudios Superiores de Tampico, Tamaulipas, y en 2016 asumió el cargo de fiscal.

Tras encabezar la 49 reunión del mando único, el gobernador de Veracruz, Miguel Ángel Yunes Linares, dijo que el atentado no tiene que ver con su trabajo; se trata de otro tema que no puedo dar a conocer porque entorpeceríamos la investigación.

Más tarde, la Fiscalía General del Estado informó que su homóloga regional de la zona norte-Tantoyuca inició una investigación por el homicidio de la titular de la Fiscalía Especializada en Investigación de Delitos de Violencia contra la Familia, Mujeres, Niñas y Niños y Trata de Personas.

Torres Castellanos estaba adscrita a la Unidad Integral de Procuración de Justicia del primer distrito judicial con sede en Pánuco, considerado feudo político de la familia de Ricardo García Guzmán, quien fue contralor durante el gobierno anterior e impulsó a su hijo, Ricardo García Escalante, a fin de que obtuviera la alcaldía para el periodo 2013-2017. Su otro vástago, Rodrigo García Escalante, es diputado local por ese distrito.

Antes de asumir la fiscalía de Pánuco, Torres Castellanos trabajó para el ayuntamiento encabezado por Ricardo García Guzmán (2007-2010) como auxiliar jurídico en la policía municipal, asesora jurídica del ayuntamiento e inspectora de alcoholes.

Este homicidio se da en medio de un repunte de la violencia en Veracruz, que el fin de semana dejó un saldo de más de 20 muertos. Entre las víctimas están el alcalde de Ixhuatlán de Madero, Víctor Espinoza Tolentino; su esposa, Hilda Patricia Carrera Tinoco, y tres acompañantes.

Mientras, cerca de las 21 horas del domingo, el priísta Isaí Ortiz Hernández, ex munícipe de Guevea de Humbold por el sistema de usos y costumbres (2007-2009) fue asesinado a balazos en el municipio de El Espinal, reportaron autoridades del Istmo de Tehuantepec.

Ortiz Hernández, de 39 años, originario de la sierra mixe-zapoteca, cargaba combustible cuando recibió varios impactos de bala; uno de los despachadores resultó herido. El ex alcalde murió camino al hospital.

En Michoacán, cientos de habitantes de Sirío, municipio de Los Reyes, colocaron barricadas en cinco puntos de los caminos de acceso para defenderse del crimen organizado, que desde hace años ha saqueado sus bosques y los extorsiona.

Autoridades del anexo de Sirío en la tenencia de Pamatácuaro dijeron que la tarde del domingo comuneros armados con palos, machetes y algunas armas de fuego colocaron los retenes para impedir el paso a fuereños.

Las autoridades pidieron al gobierno del estado que intervenga porque la situación es cada vez más crítica. Relataron que el pasado 24 de noviembre tres auxiliares de seguridad, junto con una patrulla y una camioneta, fueron plagiados por un grupo armado, por lo que bloquearon la carretera que comunica a Tingüindín. Ocho horas después los guardias aparecieron golpeados.

(Con información de Ernesto Martínez Elorriaga, corresponsal)