Si pelearan contra rivales cómodos, el público reclamaría, advierte el púgil
Martes 28 de noviembre de 2017, p. a12
Un golpe de suerte abrió la puerta a Miguel Mickey Román. Estaba preparado para un combate atractivo, pero las circunstancias lo pusieron en el camino del prestigiado Orlando Siri Salido por el campeonato interino superpluma del Consejo Mundial de Boxeo (CMB), el 9 de diciembre en Las Vegas.
Una mezcla de pequeños accidentes y nombres modificaron su escenario actual. Siri disputaría el título ante el monarca Miguel Berchelt, pero éste sufría de una lesión que se agravó cuando peleó contra el japonés Takashi Miura. La cancelación dio paso a Román y la posibilidad de un campeonato interino.
En esa división los nombres se mezclan como naipes. Miura, el japonés que retiró Berchelt y contra el que se agravó la lesión de la mano, venció a Román en enero de 2017. Aunque el mexicano tuvo momentos brillantes, Miura terminó por derrotarlo con nocaut técnico.
“A pesar de la derrota, la televisora HBO volvió a confiar en mí para un buen espectáculo; esa pelea me abrió la oportunidad de estar peleando contra Siri en Las Vegas”, afirma Román; la exhibición que di gustó en Estados Unidos
.
Enfrentar a Salido es una fortuna ambigua, concede Román, pues el sonorense es uno de los adversarios más bravos, violentos e incansables de la división. A eso agrega Román la experiencia que tiene Siri, un veterano muy peligroso ante el que se jugará parte de su futuro.
Todo boxeador espera que la siguiente contienda mejore su vida
, explica; “en esta contra Siri está en juego la posibilidad de tener ganancias importantes. De que, de triunfar, se me presenten las grandes peleas y pagos que cambian la vida. Hay mucho en esa pelea que definirá el futuro y por eso debo ganarla”.
Román trata de pensar demasiado en el peso del futuro que hay en este compromiso. Lo hace para no tener presión adicional. Lo único que le ocupa la mente es llegar en condiciones inmejorables para un enfrentamiento que se pronostica violento.
Somos varios en esta categoría que salimos a dar todo, que peleamos sin tregua y con coraje, eso es muy arriesgado para cualquiera
, admite Román; pero eso también es lo que nos cotiza, porque es lo que la gente agradece cuando lo ve. Si peleáramos con puros rivales cómodos, el público lo reclamaría. Por eso los boxeadores mexicanos interesamos al negocio en Estados Unidos
.
Recuerda las consecuencias de los combates que sostuvieron su próximo rival, Salido, contra Francisco Bandido Vargas –quien era su rival antes de cambiar por Siri–, ambos lastimados por la cantidad extrema de golpes que se lanzaron. Las cejas del Bandido, tan lastimadas que necesitaron cirugía.
Es peligroso enfrentar a rivales así, pero sólo así se entra al negocio del boxeo
, cuenta; “no pienso tanto en Siri. Yo me preocupo por mi pelea, por llegar perfecto y por lo que puedo ganar si lo derroto”.