Monterrey, NL.

La poderosa escuadra de Rayados, con su constelación de jugadores internacionales, está en semifinales y se confirmó como favorita al título, tras masacrar 4-1 al Atlas (global 6-2). La defensa rojinegra hizo agua, cometió errores infantiles que fueron capitalizados por el desbocado conjunto regiomontano, en el partido que pudo ser el adiós del zaguero Rafael Márquez, quien salió llorando del campo al minuto 51, otra vez lesionado.

Con el portero Hugo González como único futbolista nacido en México, la plantilla dirigida por Antonio Mohamed se dio un festín en su nuevo estadio, colmado por unos 45 mil fanáticos que, con algunos huecos, pintaron las gradas de blanco y azul.

Desde el primer tiempo los Rayados esclarecieron el camino hacia la aplastante victoria, mientras Atlas tuvo un destello al minuto dos, cuando ganó un tiro de esquina que cobró Christian Tabó, el cual conectó Jaine Barreiro, pero su cabezazo se fue a un lado.

Al minuto 14 el argentino Rogelio Funes Mori puso el 1-0 tras gran servicio del colombiano Avilés Hurtado. Funes no dejó botar el balón y le dio dirección para provocar el primer estallido de euforia en las tribunas.

Los rojinegros se desplomaron, sobre todo la zaga, porque al minuto 25 perdieron el balón en la salida, chocaron tres defensas visitantes y Márquez salió con un corte en la sien derecha; Funes Mori recuperó el esférico y sirvió al uruguayo Carlos Sánchez, quien anotó el segundo tanto para los de casa.

Otro error en la salida dio paso a la goleada: el colombiano Avilés Hurtado no perdonó y definió certero para el 3-0, que era ya una losa sobre los tapatíos. Un bálsamo resultó la marcación de un penal por falta de Stefan Medina. Al manchón fue Milton Caraglio, quien engañó al guardameta, para el 3-1.

Avilés Hurtado, líder romperredes del torneo, firmó su doblete al minuto 39, después de otro desaguisado en la zaga. El portero Miguel Fraga salió a cortar el balón por alto y chocó con Barreiro, quien en su afán defensivo le estorbó, la pelota quedó a modo para Hurtado y éste le dio dirección a meta con fino toque. Fue el 4-1 que puso en la lona a los Zorros.

El Atlas se fue al descanso arrastrando los pies, con el capitán Márquez con la cabeza vendada y una gorra elástica negra. En el complemento, Rafa se lastimó el muslo derecho, dio puñetazos en el pasto, dolido, y salió llorando del campo; el público local lo ovacionó como si fuera uno de los suyos. En su lugar entró Luis Enrique Robles, al 51.

Antes, al arranque del complemento, el técnico visitante, José Guadalupe Cruz, hizo dos cambios: sacó a Juan Pablo Vigón y a Ravel Morrison, para la entrada de Javier Salas y Matías Alustiza.

Mohamed también hizo movimientos. Al minuto 46 Medina salió para la entrada de Efraín Juárez, y después Carlos Sánchez se fue entre aplausos (51).

Al minuto 58, Fraga realizó una valiente salida y en un mano a mano evitó que Neri Cardozo hiciera más humillante la derrota. El portero se aplicó en otro par de ocasiones; después, los superlíderes se conformaron y el marcador ya no se movió.