El rector de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM), Enrique Graue Wiechers, consideró inaceptable que existan universidades públicas en riesgo de subsistencia para 2018, debido a que enfrentan desequilibrios presupuestarios y porque los recursos destinados a la educación superior son insuficientes.

Al participar en la reunión por el 38 aniversario de la Asociación Autónoma del Personal Académico de la Universidad Nacional Autónoma de México (Aapaunam), afirmó que es indispensable la existencia de fondos de contingencia para salvaguardar la función de estas instituciones, necesarias para el futuro y la paz social de la nación.

Las situaciones de potencial quiebra financiera en algunas instituciones de educación superior tienen orígenes diversos, que van desde el flujo tardío e insuficiente de recursos estatales o mala planeación financiera, hasta acuerdos laborales indebidos que han impedido las reformas estructurales necesarias para el ejercicio presupuestal adecuado, subrayó Graue.

Apoyarlas, en cualquier caso

De igual manera, enfatizó que cualquiera que sea el caso, las universidades deben ser apoyadas para que puedan resolver en forma definitiva las carencias financieras a las que están sujetas.

El rector de la máxima casa de estudios explicó que estas amenazas sobre la educación superior se presentan en momentos en que la Auditoría Superior de la Fede- ración (ASF) ha detectado simulaciones, desvíos y asignaciones indebidas en algunas universidades, lo cual es inaceptable.

Los responsables deben rendir cuentas de sus acciones y responder por sus actos; pero todas las instituciones de educación superior no pueden ni deben ser castigadas por el indebido actuar, en algunos casos, de un puñado de autoridades o administradores irresponsables, puntualizó.

De igual forma, Graue expuso que hay Congresos locales que han propuesto modificar la ley orgánica de alguna universidad pública con la pretensión de que su contraloría sea desligada de la administración universitaria e impuesta desde el poder local.

Lo anterior constituye una flagrante violación a la autonomía universitaria y a la Constitución y debe ser rechazada enérgicamente. La autonomía lleva implícita la autogestión. Sólo así se pueden entender la libertad de cátedra y la autodeterminación del rumbo de nuestros quehaceres, aseveró.

Las contralorías y los órganos internos de control universitarios, de acuerdo con el rector, deben estar desligados de los intereses de la administración y electos por cuerpos colegiados para así cumplir con su importante labor de manera cabal y sin suspicacias.

Ejercicio 2016, sin observaciones

Durante la reunión efectuada en la Casa Club del Académico, el rector informó que en el caso de la UNAM, la ASF no hizo ninguna observación relevante al ejercicio del 2016 y reconoció la labor del patronato universitario y a la Secretaría Administrativa de la institución.

Asimismo, refirió que la universidad nacional resistió en este año los embates de un presupuesto apenas suficiente para cumplir con sus funciones sustantivas, y aun así pudo incrementar en 3 por ciento la matrícula del bachillerato y en casi 5 por ciento la de licenciatura y de posgrado.