La obra cumbre de Carl Orff tendrá dos funciones en el Auditorio Nacional
imán especialde Carmina Burana
pieza con un magnetismo muy especial. En la imagen, un ensayo de la obraFoto José Jorge Carreón/ cortesía de la producción
Miércoles 22 de noviembre de 2017, p. 6
La obra cumbre del compositor alemán Carl Orff, Carmina Burana, la cual está basada en 24 poemas escritos por goliardos, entre los siglos XI y XIII, es considerada por el director Carlos Miguel Prieto una pieza que posee un imán especial
que siempre llena cualquier escenario.
Carmina Burana, con una producción monumental a cargo de 250 artistas, regresa este miércoles y mañana al Auditorio Nacional.
La Orquesta Sinfónica Nacional (OSN), dirigida por Carlos Miguel Prieto, con la participación del tenor Víctor Hernández, el barítono Enrique Ángeles, los coros EnHarmonia Vocalis, el Coro Infantil Schola Cantorum de México, y como soprano solista Susana Zabaleta, estarán acompañados en el escenario por la agrupación Danza Contemporánea de Cuba y Cory Stearns, primer bailarín del American Ballet Teatre.
Carlos Miguel Prieto (Ciudad de México, 1965) considera que Carmina Burana atrae mucha taquilla, porque tiene la teoría de que nuestros cerebros agradecen mucho lo que se repite.
“Una de las marcas de Carmina es la repetición, no como defecto, sino como virtud. La orquesta es muy grande, tiene dos pianos, muchas percusiones, un coro grande y creo que esta historia de monjes benedictinos que se emborrachan y tienen una vida que a veces no nos imaginamos gusta a las personas.
Misteriosa conexión
Prieto reconoce que es un misterio la conexión de la obra de Orff con las personas. La pieza tiene un magnetismo muy especial; es como en los supermercados, debe haber secciones donde se vende más o menos, pero otras venden mucho porque a la gente siempre le gusta comer tortillas. Así es con la música, nosotros podemos hacer Mendelssohn, lo que usted quiera, ahí vamos a tener buen público pero con éste sabemos que se llena y además es bailado
.
El director de la OSN opina que escenificar Carmina Burana como ópera y con danza fue un deseo de Carl Orff, pues en la primera página de la partitura escribió: “‘para orquesta y coros, danzantes’, se ve que él quería que fuera un espectáculo más allá de la música. La obra tiene muchos atractivos y para el público que nunca ha ido a un concierto sería una muy buena idea venir a éste.
“Sospecho que hay quien sólo viene a Carmina porque hay público que me pregunta: ‘¿cuándo vuelve hacer Carmina?’”
Esa pieza posee mucho más magnetismo, sostuvo Prieto, porque Orff se encontró los cantos en una tienda de segunda mano en Munich y la historia del libro también es maravillosa.
“La parte más bonita, la más poética para mí, es el final de la tercera, donde aparecen los niños y la soprano. Creo que ahí Carl Orff logra una belleza especial, pero cada parte tiene su atractivo, los dos pianos. También compuso la obra Catulli Carmina, que tiene como cuatro o cinco pianos y percusiones, o sea que le gustaba esa combinación.”
Para la producción monumental 2017 de Carmina Burana, la compañía Danza Contemporánea de Cuba diseñó la coreografía y contará con la participación del bailarín Cory Stearns, quien inició su formación dancística en Seiskaya Ballet, con Valia Seiskaya.
Carmina Burana, con la OSN dirigida por Carlos Miguel Prieto, se presentará hoy y mañana a las 20:30 horas en el Auditorio Nacional (Paseo de la Reforma 50, Bosque de Chapultepec, estación Auditorio del Metro).