Xalapa, Ver.

Santana Cruz Bahena, presidente municipal electo de Hidalgotitlán, postulado por el partido Nueva Alianza, fue asesinado ayer por un comando a las puertas de su casa.

Según la policía, alrededor de las 15 horas unos 30 pistoleros encapuchados llegaron al domicilio del edil, ubicado en la calle José Azueta del Barrio Centro, en la cabecera municipal.

La mitad de los agresores se quedó a unos metros de la casa y el resto avanzó hacia el portón y gritó a Cruz Bahena que saliera o matarían a su familia.

El alcalde se encontraba en la vivienda, acompañado de unas 15 personas, con quienes minutos antes había realizado una cabalgata en ese municipio del sureste del estado.

Como Santana Cruz no salió, los sujetos armados forzaron el portón, irrumpieron en la casa, lo sacaron y lo mataron. Los acompañantes del alcalde nada pudieron hacer, pues los pistoleros los obligaron a permanecer en el piso.

El crimen causó conmoción entre los habitantes de Hidalgotitlán. Frente a la casa del alcalde electo, quien asumiría el cargo el próximo primero de enero, se congregaron decenas de personas.

La fiscalía estatal informó que un grupo delictivo vinculado al tráfico de combustible robado podría estar involucrado en el homicidio del alcalde. Señaló que se investigará a la policía municipal y a otras autoridades por probable omisión.

Con Santa Cruz Bahena suman cinco presidentes municipales asesinados este año. Los otros son Crispín Gutiérrez, de Ixtlahuacán, Colima (20 de octubre); Manuel Hernández Pasión, de Huitzilan de Serdán, Puebla (10 de octubre); Stalin Sánchez González, de Paracho, Michoacán (6 de octubre), y Antolín Vidal Martínez, de Tepexco, Puebla (25 de enero).

Hallan restos humanos

Elementos de la Secretaría de Seguridad Pública de Veracruz encontraron 11 bolsas con los restos de cinco personas. El hallazgo se realizó la noche del domingo en la reserva ecológica El Tejar, ubicada dentro del núcleo urbano de Xalapa, capital del estado.

Cuatro de las víctimas ya fueron identificadas. Dos habían sido reportadas como desaparecidas 48 horas antes, luego de ser secuestradas en distintos puntos de Xalapa. Según familiares, se dedicaban a la compraventa de chatarra y a la mecánica automotriz, informó la Fiscalía General del Estado.