Jueves 9 de noviembre de 2017, p. 38
Huntsville. Texas. El mexicano Rubén Ramírez Cárdenas fue ejecutado anoche, con una inyección letal, en la unidad carcelaria Walls, en un nuevo desacato a la justicia internacional y sin atender las recomendaciones y súplicas de organismos de derechos humanos y del gobierno de México. El connacional, de 47 años y originario de Irapuato, Guanajuato, fue declarado muerto a las 22:26 hora local, luego de que fracasaron los últimos intentos de sus abogados por salvarle la vida. La ejecución se realizó cuatro horas después de lo programado –a las 18 horas–, debido a que la Suprema Corte de Justicia de Estados Unidos revisaba las apelaciones presentadas por los juristas. El mexicano fue acusado de violar y matar a su prima Mayra Azucena Laguna, en febrero de 1997. En su cuenta de Twitter, el presidente Enrique Peña Nieto expresó su firme condena a la ejecución de Cárdenas Ramírez en Texas, que viola la decisión de la Corte Internacional de Justicia. Mi más sentido pésame a los deudos
. La Secretaría de Relaciones Exteriores condenó la ejecución y reiteró su oposición a la pena de muerte, porque se trata de una sanción que socava la dignidad de las personas.