Se disparan 77.5% robos; huachicoleros pasaron de saquear ductos a autotanques, dice
Miércoles 8 de noviembre de 2017, p. 21
El abasto de gasolinas, diésel, turbosina y combustóleo en el país está en riesgo, debido a que Petróleos Mexicanos (Pemex) incurre en reiterado y cíclico retraso de pagos a 157 empresas de autotransporte que le dan el servicio con 3 mil 300 unidades, advirtió José Refugio Muñoz López, vicepresidente de la Cámara Nacional del Autotrasporte de Carga (Canacar).
Pemex Logística dejó de pagar a tiempo a los transportistas en agosto, septiembre y octubre de este año, con lo que acumuló un adeudo de mil 500 millones de pesos
, explicó.
Aclaró que si bien apenas liquidó la mayor parte, todavía le resta pagar 500 millones de pesos, más lo que se acumule cada día, pero el retraso provocó que 10 por ciento de las empresas autotransportistas a su servicio, unas 15, suspendieran actividades por falta de liquidez.
Hay riesgo de quiebra técnica con la consecuente amenaza de suspender el servicio y que haya desabasto de combustibles en el país
, indicó.
La situación se torna crítica si se considera que 30 por ciento de las gasolinas que se consumen en el país son trasladadas por autotanques del sector; lo mismo ocurre con 91 por ciento de la turbosina que se ocupa en los aeropuertos del país, donde las reservas que se tienen al respecto para abastecer aviones sólo es de uno a 5 días. Los aeropuertos que enfrentan más riesgo de desabasto son los de Cancún, Monterrey y los que se ubican en la región del Golfo de México.
Refugio Muñoz puntualizó que no se trata de una amenaza al gobierno federal sino de advertir del peligro que existe si Pemex no cumple a tiempo con los pagos a los autotransportistas y de que se rompa la cadena por el eslabón más débil. Así que demandó la intervención de los titulares de Pemex, la Secretaría de Energía e incluso del Ejecutivo federal.
A los impagos de Pemex se agrega la inseguridad que padecen los autotransportistas, pues de enero a octubre de este año fueron víctimas de 142 robos de combustible, lo que representa un incremento de 77.5 por ciento en comparación con igual periodo del año pasado, cuando fueron 80 casos.
Los robos en los nueve meses referidos también superan los 98 que en total se cometieron en los 12 meses de 2016, y el dirigente de la Canacar lo atribuyó a que con los operativos que el gobierno federal ha emprendido contra los llamados huachicoleros, el robo de combustibles se trasladó de los ductos de Pemex a los autotanques de los transportistas.
Con el contrato desventajoso que tienen con Pemex, los transportistas están obligados a pagar el deducible mientras la empresa recibe completa la indemnización del seguro, por lo que nunca pierde
, sostuvo Muñoz López.
Embestida contra la zona centro
Los robos se aglutinan en la región centro del país; es decir, el “corredor huachicolero” que va de Veracruz, pasando por Puebla y llega a Ciudad de México.
El dirigente de la Canacar destacó que hay rezago de 11 por ciento en la actualización de tarifas que Pemex paga a los transportistas, pues mientras el precio del diésel aumentó 22 por ciento en este año, y con ello el gasto de las empresas por cada kilómetro recorrido subió 16 por ciento, la empresa productiva del Estado sólo aplicó un aumento de 5 por ciento.
Pemex ha incumplido reiteradamente el contrato que en 2009 celebró con los transportistas, en el sentido de que se actualizarían las tarifas que les paga conforme a la inflación, y aunque en febrero de 2017 se firmó un nuevo contrato, éste no se ha implementado pese a que hace dos meses concluyeron 8 talleres que se acordaron entre ambas partes para mejorar el servicio.
Por la infraestructura que tiene Pemex, que la ubica como la quinta empresa más grande del mundo, y en la que incluso debe considerar la red de autotransportistas que trabaja con ella, éstos han presentado propuestas que no han sido tomadas en cuenta, entre ellas que se les permita abastecer directamente a las gasolineras con lo que se reducirían los costos, o que en ciertas regiones del país se utilicen autotanques en lugar de ferrocarriles para el suministro de combustibles.