Integrantes de la terna para ocupar la rectoría de la Universidad Autónoma Metropolitana (UAM), plantel Azcapotzalco demandaron a la Junta Directiva de la casa de estudios apegarse a la legalidad y designar al nuevo director de entre los candidatos que propuso el ahora ex rector de la UAM, Salvador Vega y León.

En entrevista, Nicolás Domínguez Vergara y Mario Guillermo González Rubí, profesores investigadores de la casa de estudios y aspirantes al cargo, señalaron que no están de acuerdo con que haya un nuevo proceso de elección ni permitirán que se viole la legislación. Aquí se están transgrediendo las leyes internas. La UAM debe volver a la legalidad que nos asegure mejor convivencia y el futuro de la propia universidad. Quien la debe hacer cumplir es el actual rector general, Eduardo Peñalosa Castro.

De acuerdo con los académicos esta es la primera vez en más de 40 años de la unidad Azcapotzalco que una elección se retrasa varios meses. La mayoría de la comunidad se pronunció por el respeto a la terna electa y la obligación de la Junta Directiva de hacer el nombramiento. Esperamos que el rector vea y escuche lo que está pasando. Estamos de acuerdo en cooperar y trabajar con él. Volvamos a la legalidad, es la que nos va hacer prosperar. Se debe respetar y fortalecer la certeza jurídica de la universidad y su comunidad, así como cumplir con su marco normativo.

Reiteraron que desde julio la unidad Azcapotzalco no tiene rector y pese a que cumplieron con todos los requisitos de la convocatoria que los llevó a la terna, ya no llegaron a la etapa final de la entrevista para decidir quién quedaría al frente.

“Un día antes nos marcaron al teléfono de la oficina de la Junta Directiva para informarnos que las entrevistas se cancelaban pues supuestamente objetaron la terna por irregularidades en el proceso, las cuales nunca demostraron. No hubo ficio ni fundamento jurídico sobre los motivos de las cancelación.

De acuerdo con la legislación universitaria sólo tenían cinco días para objetar, pero pasaron ocho. Hemos sostenido que esa violación a la norma por parte de la Junta Directiva y todo lo sucedido después, es ilegal. La única forma en que está arbitrariedad se puede resolver es que todos los hechos irregulares no sean tomados en cuenta y se quede lo que la propia junta estableció desde el principio; es decir, la aceptación de la terna, por unanimidad. Este martes se reúne de nuevo el Consejo Académico para seguir discutiendo el tema.