Lunes 6 de noviembre de 2017, p. 29
Londres. El escándalo que rodea a la clase política británica se profundizó con más denuncias de acoso sexual, abuso de poder y otros actos indebidos, en nuevas acusaciones que involucran al primer secretario de Estado Damian Green, quien negó un informe del diario Sunday Times que indicaba que la policía encontró pornografía extrema
en su computadora durante una investigación hace nueve años. Green ya era investigado por conducta inapropiada contra una activista del Partido Conservador. Las acusaciones van mucho más allá de Green, mano derecha de la premier Theresa May, y del ex secretario británico de Defensa Michael Fallon, quien renunció la semana pasada luego de que surgieron denuncias de comportamiento inapropiado. En Gran Bretaña, un número cada vez mayor de legisladores enfrentan acusaciones similares.