Empresas arrasan cerros y dañan acuíferos y viviendas para extraer materiales, acusan
Lunes 6 de noviembre de 2017, p. 32
Teotihuacán, Méx.
Unos 150 pobladores, en representación de ocho municipios, marcharon ayer por el circuito de la zona arqueológica de este municipio a fin de exigir a las autoridades que detengan la devastación de 30 cerros de donde se extrae material pétreo para las obras del Nuevo Aeropuerto Internacional de la Ciudad de México (NAICM).
Los manifestantes anunciaron que cada una de las comunidades afectadas interpondrán amparos para evitar que continúen explotando sus cerros y devastando flora y fauna.
Los inconformes, provenientes de los municipios de Temascalapa, Tezoyuca, Acolman, San Martín de las Pirámides, Axapusco, Otumba, Teotihuacán y Nopaltepec, iniciaron temprano su protesta en el circuito atrás de la Pirámide de la Luna.
Se detuvieron en cada una de las puertas de acceso a las pirámides para dar a conocer su lucha a los turistas. Algunos de los visitantes mostraron apoyo a la manifestación.
Luego de gritar consignas como ¡Peña Nieto, entiende, los cerros no se venden!
; ¡cerros sí, aeropuerto no!
y ¡no queremos minas!
, los vecinos denunciaron que hace más de un año comenzó la explotación indiscriminada de los montes de la región para las obras del NAICM, lo que afecta el medio ambiente.
Hemos contado cerca de 30 cerros de distinto tamaño en los municipios de Tezoyuca, Acolman, Teotihuacán, San Martín de Las Pirámides, Otumba, Axapusco y Temascalapa, que están siendo devastados para la extracción de tezontle. Vemos filas de camiones cargados de tepetate y piedras, día y noche
, acusó Luis David Aguilar Velasco, uno de los representantes.
Explicó que la explotación de los cerros destruye zonas de recarga de acuíferos, afecta viviendas por el paso de camiones pesados, como en Tezoyuca; provoca accidentes carreteros y deterioro de caminos; además, los dueños de la minas han amenazado a los pobladores que protestan por los daños.
“En menos de un año varios cerros desaparecieron. Muchas empresas mineras ni siquiera tienen permisos, mienten a las comunidades, pues se requiere un dictamen, pero las autoridades están coludidas con los empresarios y se hacen de la vista gorda.
Desde hace 10 años diversos grupos, entre ellos el Frente de Pueblos en Defensa de la Tierra de San Salvador Atenco, se han opuesto a las obras del nuevo aeropuerto; realizaron foros con especialistas para advertir sobre el riesgo de devastación, pero nadie les hizo caso y ahora estamos viendo las consecuencias
, expresó Aguilar Velasco.