De las más de 21 mil cámaras de videovigilancia instaladas en la Ciudad de México para garantizar la seguridad de sus habitantes, un total de mil 237 se encontraban, hasta agosto pasado, fuera de operación.

Así lo detalló el Centro de Comando, Control, Cómputo, Comunicaciones y Contacto Ciudadano de la Ciudad de México (C5), organismo que precisó que 80 por ciento de las cámaras, equivalente a 912, quedaron totalmente inservibles debido a la obsolescencia del equipo.

Los datos proporcionados a partir de una solicitud de información pública indican que las otras 325 no estaban funcionando por siniestros o fallas en el suministro de energía eléctrica, entre otras razones.

De acuerdo con el portal de Internet del C5 –consultado anoche– este centro de comando “opera y monitorea las más de 15 mil cámaras de vigilancia que hay en la Ciudad de México (Sistema Tecnológico de Videovigilancia STVs), así como las 6 mil instaladas en el Sistema de Transporte Colectivo Metro, con la finalidad de prevenir y alertar inmediatamente a las autoridades de seguridad y de emergencias capitalinas sobre cualquier situación de riesgo”.

Como parte de las respuestas entregadas por dicha instancia gubernamental, se dio a conocer que de 2011 a julio de 2017 se han presentado un total de 359 denuncias o querellas ante el Ministerio Público derivado de las afectaciones o siniestros que han sufrido las cámaras de videovigilancia instaladas en esta capital.

Con relación a la pregunta de cuántos de esos equipos tecnológicos se vieron afectados por algún hecho de vandalismo durante los últimos seis años y medio, el organismo público resaltó que no se cuenta con evidencia documental de que alguna cámara haya sido vandalizada o sufriera algún daño de manera intencionada.

Por último, y respecto de la ubicación de las videocámaras que están fuera de operación, el C5 rechazó proporcionar esos datos, pues se trata de información reservada, clasificación que tendrá por los próximos tres años.