Xalapa, Ver.

Karina Velásquez de los Santos, de 12 años, comenzaba su día a las seis de la mañana. Se bañaba y se iba a la escuela. Después de las 14:30 horas, se dedicaba a vender verduras al lado de su abuela, Ángela de los Santos González, de 52 años. Con palanganas en la cabeza, ambas recorrían las colonias más pobres del municipio de Las Choapas, ofreciendo hierbas: perejil, epazote, albahaca y hierbabuena.

Dalila Velásquez de los Santos, de 27 años, madre de Karina, no tiene muchos detalles de cómo ocurrió la agresión, pero dice que la tarde del miércoles 1° de noviembre, a las 18 horas, Karina, su otra hija de nueve años, su media hermana y su madre, mientras vendían en la colonia Reforma, municipio de Las Choapas, dos hombres armados, a bordo de motocicletas, les dieron alcance.

A las primeras que les dispararon fue a mis hijas, hirieron a Karina en el estómago y cuando iban a dispararle a la otra, de nueve años, mi mamá se puso enfrente y la mataron también. Mucha gente vio, pero no las quisieron ayudar, todos se metieron a sus viviendas.

La agresión parece haber derivado de una confusión con la media hermana de Dalila Velásquez, quien pudo ponerse a salvo y ahora permanece bajo resguardo policiaco.

Sin el apoyo del padre de sus cuatro hijos, Dalila Velásquez relata que tenía que dejar a Karina y sus cuatro hermanos al cuidado de su madre mientras ella se iba a Coatzacoalcos a trabajar.

Entre Karina y su abuela había un lazo muy estrecho: “Se buscaban mucho, andaban juntas para todos lados. Mi mamá siempre le decía: ‘échale ganas en la escuela, trata de ser alguien en la vida’”.

Karina cursaba el quinto año de primaria y en sus libretas le gustaba dibujar ositos y corazones. En alguna plática con sus familiares, les contó la ilusión que tenía de ser doctora.

“Ella pensaba ser licenciada o una doctora porque quería salvar vidas. Nos decía: ‘cuando tú o mi abuela se enfermen, yo voy a cuidarlas’.”

Tras la agresión que frustró los sueños de Karina, su madre deambula por las calles del pueblo pidiendo limosna para cubrir los gastos funerarios. La familia no podrá velar los restos de la menor y su abuela en la localidad de donde son originarias debido al temor de una nueva agresión.

Después de que las atacaron, fueron a la casa a revolver todo, dice la mujer, quien trata de conseguir el dinero para el traslado de los restos. Yo pido al gobernador (Miguel Ángel Yunes Linares) que nos ayude, no tenemos ni un peso para sepultar a mi hija y su abuela.”

Desde que se inició 2017 la violencia en Las Choapas se ha disparado. Se presume que la región es motivo de disputa entre Los Zetas y el cártel de Jalisco Nueva Generación.

En lo que va del año, al menos 15 menores han sido víctimas de la violencia en el estado. Entre los casos sobresale el de varios adolescentes asesinados el 4 de junio, en su casa, en la colonia Nueva Calzada, municipio de Coatzacoalcos, presumiblemente por parte del crimen organizado.