Luego de que la producción nacional de café tocó fondo hace unos tres años, ahora la situación empieza a cambiar y para el ciclo 2018-2019 estaremos rebasando el máximo histórico, que fueron 4.5 millones de sacos del aromático, aseguró Cruz José Argüello Miceli, coordinador ejecutivo de la Asociación Mexicana de la Cadena Productiva del Café (Amecafe).

En entrevista, detalló que hace tres años los productores estaban de capa caída, porque la producción había descendido drásticamente. Llegamos a producir sólo entre un millón 800 mil y un millón 900 mil sacos.

En ese tiempo el hongo de la roya estaba afectando los cafetos, sobre todo en Veracruz y Chiapas, entre otros circunstancias adversas para el sector.

Ahora ha habido un repunte de más de un millón 300 mil sacos, la producción se situó en unos 3 millones 300 mil sacos, gracias a la interlocución que hay entre la Secretaría de Agricultura, Ganadería, Desarrollo Rural, Pesca y Alimentación (Sagarpa) y los productores, y también porque estos últimos están haciendo su parte, pues ya hay mejores manejos de los cafetales.

Añadió que por medio de programa integral hay renovación de cafetales, asistencia técnica, paquetes tecnológicos y construcción de viveros comunitarios. Derivado de esto auguró que para el ciclo 2017-2018 llegaremos a los 4 millones 200 mil sacos y consideró que eso hace viable que para 2030 la producción nacional del aromático pudiera llegar a unos 10 millones.

Después de una dura crisis, los productores de café están confiados en superar cada año las metas de producción y exportación del aromáticoFoto José Carlo González

Argüello Miceli agregó que el consumo interno del producto también va al alza, pues de acuerdo a un estudio de mercado tenemos 2 millones 900 mil sacos de consumo interno. Va hacia arriba, año con año aumenta aproximadamente 5 por ciento. Estamos optimistas, por un lado el incremento de la producción y por otro el consumo interno y la exportación. El café mexicano está posicionado por su calidad.

Comentó que México también importa café que se trae como materia prima, se industrializa y vuelve a salir. La cantidad de este aromático que se ingresa al país es de alrededor de 2 millones de sacos al año, unos 500 mil de café robusta y un millón y medio de arábiga. Argüello Miceli confió en que en unos años más venga una regulación y se importe menos café para poder vender todo el que vamos a producir.

Respecto a los países a los que México vende, dijo que 80 por ciento de lo que se exporta de aromático va a Estados Unidos” y el resto a Canadá y Europa, así como a algunos países asiáticos.

El mercado estadunidense es el que mejor nos paga el café, de 10 a 15 por ciento más, pero es muy exigente, también los asiáticos pagan bien, pero hay mucha exigencia.

Sobre el Tratado de Libre Comercio de América del Norte (TLCAN) explicó que el café prácticamente no está dentro del tratado. Afortunadamente Estados Unidos no produce café. Descartó que se pueda aplicar algún tipo de arancel.