México debe plantearse una nueva agenda de desarrollo económico para enfrentar la eventual cancelación del Tratado de Libre Comercio de América del Norte (TLCAN), que incluya temas como el aumento a los salarios mínimos para fortalecer el mercado interno, afirmó Alicia Bárcena, secretaria ejecutiva de la Comisión Económica para América Latina y el Caribe (Cepal).

Consideró que los minisalarios deben colocarse en 15 dólares por hora trabajada, unos 288 pesos al tipo de cambio de este lunes, condición que potenciaría al mercado interno.

Al presentar el reporte Perspectivas del comercio internacional de América Latina y el Caribe 2017, Bárcena aseguró que la supresión del acuerdo comercial eliminará empleos en el país, provocará una baja de 0.9 por ciento del producto interno bruto y una caída de las exportaciones automotrices a una tasa de hasta dos dígitos.

El documento delinea tres escenarios acerca de las consecuencias de la cancelación del TLCAN en el comercio internacional de México, con base en estimaciones del Banco Interamericano de Desarrollo, la Asociación Latinoamericana de Integración y la Cepal.

El primero es un escenario en el que se asume que todos los países de la región eliminan sus aranceles a las importaciones originarias del resto de la región, lo que equivaldría a simular un gran acuerdo comercial latinoamericano. Otro, extremo, es la renegociación, en la que el TLCAN no tiene éxito y se pone término al convenio. Como consecuencia, el comercio entre México y Estados Unidos pasa a conducirse sobre una base de nación menos favorecida, con lo cual se buscaría capturar indirectamente las oportunidades que se abrirían.

El tercero y último es simultáneamente un gran acuerdo regional en América Latina y el término de las preferencias arancelarias entre México y Estados Unidos en el marco del tratado de libre comercio, es decir, una combinación de los dos primeros escenarios.

Según el reporte, la cancelación del TLCAN provocará una caída de 8 por ciento de las exportaciones de México hacia Estados Unidos y una baja en los ingresos de las inversiones.

Las cifras son cálculos únicamente, porque la renegociación del mecanismo comercial aún está en marcha y la conclusión sobre las pláticas son especulaciones, explicó Bárcena.

Sin embargo, indicó que habría sectores, como el automotriz y el agroindustrial, que registrarían descensos de hasta dos dígitos. En el caso de las inversiones estimó una baja en el producto interno bruto de 0.3 por ciento.

La secretaria ejecutiva de la Cepal agregó que, en un escenario sin TLCAN, las exportaciones mexicanas hacia los países de América Latina y el Caribe aumentarían 6.3 por ciento, dato positivo pero muy lejano para compensar las caídas de las ventas de bienes al mercado estadunidense.

Bárcena detalló que la política proteccionista de Estados Unidos no ha mermado el dinamismo de las exportaciones mexicanas hacia esa nación.

De hecho, aumentarán 9 por ciento al cierre de 2017.

Condiciones difíciles de Estados Unidos

La secretaria ejecutiva de la Cepal consideró que son difíciles las condiciones que impone el gobierno estadunidense a sus socios comerciales en las renegociaciones del TLCAN, las cuales se encuentran en su cuarta etapa.

Bárcena aseveró que los cambios a las reglas de origen para el sector automotriz y al arbitraje en caso de controversias son los temas más complicados.

En el reporte difundido este lunes, la Cepal informó que las exportaciones en América Latina y el Caribe tendrán un crecimiento de aproximadamente 10 por ciento al cierre del año, por lo que la región dejará atrás cinco años de caída en los precios de la canasta de exportación y un débil aumento del volumen vendido al exterior.