Los partidos Morena y de la Revolución Democrática (PRD) en la Ciudad de México descartaron un posible repunte del Partido Revolucionario Institucional (PRI) en la elección del próximo año con la llegada del ex gobernador mexiquense Eruviel Ávila Villegas a la dirigencia del tricolor en la capital

El presidente estatal del PRD, Raúl Flores, dijo que la designación de Eruviel Ávila como presidente interino del PRI en la capital del país es un mensaje lamentable de dicho instituto político, un castigo a los priístas capitalinos y una muestra de desprecio para todos los habitantes de la Ciudad de México, pues contribuyó a que el estado de México “se convirtiera en una de las entidades más inseguras y con mayores índices de pobreza, impunidad, injusticia y corrupción del país.

Es un personaje que intentó estrangular a la capital con decisiones como impedir la disposición final de la basura; se negó a aportar un solo peso al Metro, cuando 40 por ciento de los usuarios son mexiquenses; no estuvo dispuesto a trabajar en conjunto para afrontar la crisis ambiental, que es ya un grave problema de salud pública; y simplemente ha demostrado desprecio por las mujeres, por la clase trabajadora que diariamente invierte mucho dinero y tiempo en traslados, y en general por todos los sectores más vulnerables de la población.

Por su parte, el coordinador de la bancada de Morena en la Asamblea Legislativa, César Cravioto, dijo que es claro que llega con la consigna de comprar el mayor número de votos para el candidato presidencial de su partido con el presupuesto federal y la manipulación de los apoyos para la reconstrucción, pero aseguró que no les va a alcanzar. El Zócalo no es Toluca y el PRI no volverá nunca a gobernar la ciudad, advirtió.

No obstante, dijo, pedirá a los institutos electorales nacional y capitalino que mantengan una vigilancia muy estrecha al ex gobernador mexiquense y su partido, para impedir trapacerías, como las que hicieron en el estado de México.