Praga/ Fráncfort.

La escritora canadiense Margaret Atwood recibió ayer el Premio Internacional Franz Kafka de 2017, por el trabajo de toda su vida, durante una ceremonia organizada por la Sociedad Franz Kafka.

Este premio es muy especial para mí porque el primer ensayo independiente que escribí versaba sobre Kafka, en los años 50 del siglo pasado, dijo.

Hace unos días, en la Feria del Libro de Fráncfort, dijo que el Estados Unidos de Donald Trump le recuerda a Europa en los años 30 del siglo pasado y advirtió que el mundo se encuentra “en un momento de cambio y alteración.

Creo que es un momento de agitación en todas partes, afirmó la autora de 77 años.

Da la sensación de los años 30, manifestó en rueda de prensa, en referencia al auge de líderes populistas y del fascismo que desembocó en la Segunda Guerra Mundial. Y lo que sorprende a muchas personas en Europa es que esto está sucediendo también en Estados Unidos” que durante mucho tiempo fue considerado un modelo de democracia, añadió.

El libro de George Orwell, 1984, y la novela de Atwood de El cuento de la criada, 1985, sobre un régimen totalitario donde las mujeres fértiles viven en esclavitud sexual, resurgen ahora, considera, porque esos mundos ya no parecen tan lejanos.

La gente siente de repente que es una realidad posible, afirmó Atwood.

El cuento de la criada es ahora una exitosa serie de televisión. Y sus característicos mantos rojos y gorros blancos se han convertido en símbolos de protesta en las manifestaciones en Estados Unidos contra las amenazas al acceso de las mujeres a los servicios de salud en la administración Trump.

En Estados Unidos existe un sentimiento extendido de insatisfacción y resistencia, pero no ha surgido todavía una figura que lo lidere, consideró Atwood.

La canadiense Margaret Atwood en Praga, ayer, donde se le entregó el Premio Internacional Franz KafkaFoto Afp

El Partido Republicano está desabaratado y el Demócrata todavía debe formular su respuesta a esa situación. Uno se pregunta qué van a proponer los demócratas, porque por el momento es más bien... ¿eh, dónde están? A la pregunta de qué le diría a Trump, respondió: ¿Pueden quitarle esa cuenta de Twitter, por favor?

Crítica a Weinstein

Margaret Atwood elogió también el poder de las redes sociales para hacer oír a los sin voz, como puso de manifiesto el escándalo de abusos sexuales que rodea al poderoso productor de Hollywood Harvey Weinstein.

Nada tuvo que ver con nuestra serie, precisó, antes de añadir que la explotación de mujeres jóvenes por hombres poderosos ha ocurrido durante realmente mucho tiempo.

Sin embargo, la reciente caída en desgracia de uno de esos hombre demuestra, en su opinión, que las cosas están cambiando. Creo que ha habido un número de casos que implicaron a hombres muy poderosos defendidos por abogados en los que, en parte gracias a las redes sociales, la gente pudo hablar del tema públicamente de un modo que era imposible hace algún tiempo, afirmó Margaret Atwood.

Todo se resume en la pregunta: ¿quién es una persona?, aseguró. La única respuesta razonable tiene que ser: todos somos personas, añadió.

Y nadie debería ser tratado del modo que Harvey Weinstein trató a las personas. La escritora se encontraba en Fráncfort para recibir el domingo un galardón anual de la industria editorial alemana por el conjunto de su obra.

Los periodistas preguntaron a Atwood, cuyo nombre suena con regularidad para el Nobel de Literatura, si estaba decepcionada porque fue este año para el novelista británico Kazuo Ishiguro.

Estoy muy acostumbrada a no ganar el premio Nobel, así que realmente no me preocupa, respondió.