Teherán, París, Berlín, Londres y la UE rechazan la decisión
El Congreso de EU puede reimponer sanciones a la república islámica
Sábado 14 de octubre de 2017, p. 22
Washington.
El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, anunció ayer que no certificará el domingo próximo el acuerdo nuclear internacional para Irán, del cual no planea retirarse por ahora, al considerar a Teherán el principal patrocinador del terrorismo
, por no estar a la altura del espíritu
del pacto y haber cometido múltiples violaciones
al convenio.
No podemos ni haremos esta certificación. No continuaremos un camino cuya conclusión predecible es más violencia, terror y una amenaza muy real de un avance atómico de Irán
, argumentó Trump en un discurso televisado desde la Casa Blanca.
La ley obliga al mandatario a notificar cada 90 días al Congreso estadunidense si Irán cumple las condiciones pactadas en Viena en 2015, que incluyen limitar su capacidad de enriquecer uranio y otros materiales para fabricar armas nucleares a cambio de reducir sanciones internacionales.
Trump ya avaló en dos ocasiones la firma. De no hacerlo este domingo la decisión pasaría al Congreso, que podría reimponer las sanciones ya levantadas a Teherán y pondría en riesgo la continuidad del pacto, también negociada por China, Francia, Reino Unido, Rusia y Alemania (G5).
Trump añadió que si el Congreso no elabora una nueva norma pondrá fin al acuerdo, por lo que dio la orden al gobierno de trabajar en estrecha colaboración con las cámaras para remediar los numerosos defectos
y asegurar que Irán no amenazará a Estados Unidos con armas nucleares.
El acuerdo, aprobado durante la administración de Barack Obama, es revisado continuamente. Yo, como presidente, puedo cancelar nuestra participación en cualquier momento
, amenazó. Agregó que Teherán no está a la altura del espíritu
del pacto.
El mensaje tuvo referencias a la revolución islámica de 1979, al criticar al país persa por tener una supuesta dictadura
, ser el principal patrocinador estatal del terrorismo
y realizar ataques contra Estados Unidos y otros blancos en Medio Oriente.
Paralelamente, el Departamento del Tesoro impuso medidas económicas contra la Guardia Revolucionaria de Irán, mediante una orden ejecutiva de 2001, por apoyar el terrorismo
. Agregó a cuatro empresas a su lista negra.
Su retórica bélica fue rechazada inmediatamente por el presidente de Irán, Hasan Rohani, quien aseguró que “Estados Unidos está más solo que nunca contra el acuerdo atómico y en sus complots contra el pueblo iraní.
Mientras nuestros intereses nacionales estén asegurados nos mantendremos firmes en el cumplimiento de este acuerdo y también seguiremos cooperando con el Agencia Internacional de Energía Atómica (AIEA)
, puntualizó Rohani en un mensaje televisado.
A ese rechazo se sumaron el presidente francés, Emmanuel Macron; la canciller alemana, Angela Merkel, y la premier británica, Theresa May, quienes en una declaración conjunta confirmaron su compromiso con el convenio y se mostraron preocupados por las posibles consecuencias
.
En la misma línea, la titular de la diplomacia de la Unión Europea, Federica Mogherini, señaló que dicho tratado es internacional, por lo que no corresponde a un país rescindirlo, mientras Rusia calificó de retórica agresiva y amenazadora
la decisión estadunidense e indicó que el acuerdo con Irán permanece intacto.
El secretario general de la Organización de Naciones Unidas, Antonio Guterres, espera la permanencia de Estados Unidos en el tratado por ser un logro para consolidar la no proliferación nuclear
.
La Campaña Internacional para la Abolición de las Armas Nucleares tildó la decisión de intento de desestabilización
.
El primer ministro de Israel, Benjamin Netanyahu, felicitó a Donald Trump por su “valiente decisión, mientras Arabia Saudita elogió la resolución por promover la seguridad en la zona y hacer frente al gobierno terrorista
de Irán.
El gobierno de Canadá anunció que otorgará 1.5 millones de dólares a la AIEA para verificar el programa atómica de Irán.