Londres. El 40 por ciento de los consumidores accede a la música pirateándola, sobre todo copiando contenidos difundidos en streaming, un problema mayor facilitado por YouTube y Google, afirma un estudio del sector difundido este martes. Las maneras de piratear evolucionan rápidamente, y el fenómeno del stream ripping, dominante en estos momentos, que consiste en hacer una copia perenne de contenidos difundidos en streaming, no deja de desarrollarse y la usan ya 53 por ciento de los internautras de entre 16 y 24 años, según el informe anual de la Federación Internacional de la Industria Fonográfica (IFPI, por sus siglas en inglés). En estas escuchas ilegales, los motores de búsqueda en Internet juegan un papel determinante, asegura el estudio. Se estima que 54 por ciento de quienes cargan música ilegalmente lo hacen usando Google. Otro problema para la industria discográfica son las escuchas en video, sobre todo en YouTube, que representan más de la mitad del tiempo de escucha en streaming, sin que los músicos reciban ninguna remuneración. Esta asociación presiona para que se legisle contra este agravio: según el informe, 85 por ciento de los usuarios de YouTube se conectan por la música. Como consuelo para el IFPI, el uso de servicios streaming legales progresa y ocupa ya 45 por ciento de las escuchas, por 37 por ciento en 2016.