A pesar de que son consideradas las profesiones del futuro, el porcentaje de niñas y mujeres adolescentes que aspiran a cursar una carrera en los campos de la ciencia, la tecnología, las ingenierías y las matemáticas sigue siendo baja, alerta la Organización de las Naciones Unidas para la Educación, la Ciencia y la Cultura (Unesco).

En un reporte reciente sobre los desafíos que enfrentan las mujeres para beneficiarse de las profesiones que generarán, sólo en la Unión Europea, más de 7 millones de empleos en las próximas décadas, destaca la necesidad de impulsar su participación más efectiva en estos campos y garantizarles condiciones de equidad y mayor bienestar social.

Luego de que en agosto pasado especialistas de la organización multinacional se reunieron en Bangkok, Tailandia, para analizar los factores que inciden en la menor participación de las mujeres en las profesiones vinculadas a los campos científicos y tecnológicos, apuntaron que estas especialidades son importantes impulsores de la innovación, proponiendo nuevos enfoques y soluciones para hacer frente a los desafíos existentes y emergentes para el desarrollo sostenible, el crecimiento inclusivo y el bienestar social.

La Unesco también concluyó un informe con el fin de elaborar un mapa de la situación actual de la educación femenina en estos campos e identificar los factores subyacentes que mantienen sistemáticamente a las niñas fuera de estas áreas de estudio, con el fin de facilitar el diálogo sobre políticas y formular recomendaciones basadas en la evidencia.

Para lograr el potencial de los estudios científicos y tecnológicos, afirma la Unesco, tanto los niños como las niñas, así como hombres y mujeres, necesitan un acceso equitativo a la educación y a las carreras de estos campos del conocimiento.

Subraya que para garantizar el crecimiento inclusivo y el desarrollo sostenible para todos, las niñas y las mujeres deben contar con igualdad de oportunidades para participar y beneficiarse de estas especialidades, pues se prevé que en los próximos años se genere una enorme demanda de expertos, no sólo en los países desarrollados.

Agrega que el organismo multinacional “presta especial atención a esta cuestión como parte de sus esfuerzos generales para promover el empoderamiento de las mujeres y las niñas mediante la educación y como respuesta a la decisión de los Estados miembros de la Unesco sobre el papel de la organización para animar a las niñas y mujeres a ser líderes en ciencia, ingeniería, arte, diseño y matemáticas”.