En política agroindustrial, México logró exportar más productos agroalimentarios de los que importó, afirma el gobierno federal en el quinto Informe de gobierno. Desde 2015, luego de 20 años de déficit continuo, se alcanzó una balanza comercial agroalimentaria superavitaria.

El país incrementó la producción de diversos cultivos, por lo que avanzó entre 2014 y 2016 de la posición 14 a la 12 entre las principales naciones del mundo productoras de alimentos.

Al presentar los resultados del sector, destaca que el año pasado se tuvo un saldo positivo de 3 mil 249 millones de dólares, es decir, 200 por ciento más de lo alcanzado en 2015. Dicha tendencia, afirma, se ha mantenido, pues hasta julio pasado el superávit rebasaba 4 mil 10 millones de dólares.

Destaca que en 2016 se elevó en 11 por ciento el volumen de producción de los 52 principales cultivos. En comparación con 2012, aumentaron las cosechas de frutales en 22 por ciento; hortalizas, 21 por ciento; granos, 13.4; cultivos agroindustriales, 9.6; oleaginosas, 8.8, y forrajes, 5.7 por ciento.

La administración peñista señala que de enero de 2013 a junio de 2017, México se consolidó como una potencia exportadora emergente, pues en ese lapso se vendieron productos agroalimentarios fuera de nuestras fronteras por 122 mil 672 millones de dólares, es decir, 57.6 por ciento más que en el mismo periodo del sexenio anterior.

Destaca que la balanza agroindustrial ha ido reduciendo su déficit histórico en los pasados tres años, al pasar de 2 mil 938 millones de dólares en 2013, a 26 millones de dólares el año pasado, mientras en el primer semestre de 2017, por primera vez se obtuvo un superávit por mil 251 millones de dólares.

Respecto del apoyo a los microproductores, el gobierno federal destaca que con el Programa Nacional de Financiamiento al Microempresario y a la Mujer Rural (Pronafim), en lo que va del sexenio se han canalizado 9 mil 600 millones de pesos a instituciones de microfinanciemiento.

Dicho monto, afirma el informe, generó 4.2 millones de créditos en beneficio de poco más de 3 millones de personas, de las cuales 92 por ciento eran en su mayoría mujeres. Además se brindó capacitación a 156 mil personas y se impulsaron 7 mil 500 actividades productivas.