Lisboa. La cantante estadunidense Madonna se instaló en un hotel de Lisboa, mientras se muda a un pueblo cerca de la capital portuguesa, para que su hijo de 11 años pueda incorporarse a la academia del equipo de futbol Benfica, informaron ayer medios locales. Madonna ya no es turista, es lisboeta, asegura la revista semanal Visão, que reprodujo fotos publicadas en la cuenta de Instagram de la estrella de 59 años, tomadas durante varias visitas a Portugal en meses recientes. Trascendió que la cantante compró una casa en la bucólica localidad de Sintra. El edificio, del siglo XIX, clasificado de interés público, había sido puesto a la venta por 7.5 millones de euros y su renovación podría llevar unos seis meses, según Visão. El diario Correio da Manhã precisó, por su parte, que su hijo David Banda, uno de los cuatro adoptados por Madonna en Malawi, acabaría de incorporarse al centro de formación del Benfica en Seixal, en la periferia sur de la capital portuguesa. Tras haber pasado una prueba en primavera, el chico forma parte de las categorías jóvenes del club, y vivirá en la academia hasta que empiecen las clases en el Liceo francés de Lisboa, indicó el diario, citando una fuente próxima al Benfica.