Lunes 21 de agosto de 2017, p. 29
Río de Janeiro. Cerca de 200 personas se congregaron este domingo aquí, en la segunda ciudad más importante de Brasil, para manifestarse contra la violencia y recorrer las calles de la favela de Jacarezinho, donde los enfrentamientos armados entre policías y narcotraficantes dejaron siete muertos en días recientes. Las personas tienen miedo a salir de casa porque saben que pueden ser alcanzadas por balas perdidas
, lamentó Carmen Camerino, de 49 años, quien participa en la Marcha por la Paz, organizada por el Observatorio de Favelas. En Jacarezinho, situada al norte, cerca del aeropuerto internacional, los intercambios de disparos aterrorizan a la población desde el 11 de agosto, cuando un policía de 36 años murió durante una incursión de las fuerzas de seguridad para intentar capturar a una banda de narcotraficantes. De acuerdo con los servicios de salud municipales, dos personas murieron el pasado sábado, mientras otras tres resultaron heridas, una de gravedad.