Una de las bandas que nacieron grandes, lugares comunes aparte, es La Barranca. José Manuel Aguilera, Federico Fong y Alfonso André fueron quienes dieron vida a El fuego de la noche, álbum debut de este trío formado por músicos con amplio historial anterior a la grabación de la mencionada producción.

Sí, ya todos habíamos hecho cosas; habíamos grabado discos y habíamos estado en otras bandas. Definitivamente no éramos unos principiantes, advierte José Manuel Aguilera, al recordar los inicios de esta banda que ofrecerá un concierto especial e irrepetible el 8 de septiembre en el teatro Metropólitan, donde vamos a revisar de manera exhaustiva los dos primeros discos, que son el punto de partida de la banda, refiere.

El ex guitarrista de Jaguares añade: “Haremos arreglos especiales para esa noche y seguiremos un orden prestablecido; además, estaremos convocando a todos los músicos, porque será un formato de ‘Barranca expandida’. Estarán los músicos que grabaron estos discos y los que le siguen dando vida a estas canciones’”.

Mirada afilada como un puñal

“A veces siento que tu mirada es afilada como un puñal/ será tal vez que eres desconfiada…/ Subiste al alto de La Quebrada/ para tirar mi recuerdo al mar/ No supe ser el que tú esperabas/ yo sólo soy el que supo llegar”, invoca la letra de El alacrán, primer éxito emanado de la agrupación comandada por Aguilera.

“El alacrán y Chan chan son rolas emblemáticas para la banda (una es original y otra es un cover). Y por supuesto, deben estar presentes esa noche. Chan chan es una canción que conocimos, incluso, antes de la versión del Buenavista donde interviene Ry Cooder; fue en Opción Sónica, la escuchamos con el Cuarteto Patria que comandaba Eliades Ochoa. Y desde que la oí, me fascinó”, relata Aguilera.

Si Dios me manda la muerte/ te he de perseguir/ como una sombra..., se escucha en el surco 14 del disco Tempestad, que también será revisitado en el concierto celebratorio de esta agrupación. Tendremos chance de tocar los dos discos casi en su totalidad. Será un concierto largo, mucho más del que hicimos ya, en el Vive Latino.

Hay que recordar que El fuego de la noche salió al mercado en 1996, mientras Tempestad se grabó a escaso un año. “Sí, estamos celebrando estos dos discos. A la distancia, se nos hace muy loco que sacamos un disco en el 96 y el otro en el 97. O sea, pegaditos. Y para los estándares actuales, suena a locura… no me acuerdo de las causas o razones, pero el caso es que salieron estos dos discos. Por eso, la celebración de los dos”.

A la distancia se puede pensar por qué se dio esta inmediatez entre una y otra grabaciones; posiblemente fue consecuencia del éxito del primer disco, pero este trancazo discográfico no es fortuito, “porque llevas años trabajándolo, imaginándolo. Y eso sucedió con El fuego de la noche. Se tardó mucho su gestación; aparte, no teníamos lana, no teníamos disquera, mientras Tempestad lo hicimos rapidísimo y la verdad es que no teníamos canciones. Una cosa muy loca, pero así es la historia de la banda.

Sin embargo, ahí están esos dos discos, existen. Y los tocaremos juntos en este concierto. Paralelo a esto, estamos empezando a trabajar un disco nuevo con temas inéditos y estamos viendo si incorporamos algo de eso. Sería como una muestra de lo que viene, indica el autor de Como una sombra.

El concierto va a pasar por varias etapas. Lo medular no lo quiero revelar, pero habrá momentos en que estaremos todos los músicos tocando la misma canción. Estamos trabajando en arreglos específicos para incorporar a los ocho músicos. No nomás es subirse a tocar la rola así como un palomazo. No. Hay que ser muy precisos y específicos en lo que va a tocar cada quien. En esto nos apoyamos en la experiencia de todos los que estaremos. Al escenario subirán, además de André, Fong y Aguilera: Cecilia Toussaint, Adolfo Romero, Navi Nass, Ernick Romero y Yaan Zaragoza.

No tocaremos igual

En otra parte de la entrevista, José Manuel Aguilera afirma: “No quiero caer en un ejercicio de nostalgia. Decir: ‘salgamos a tocar igual como está el disco, como las tocábamos hace 20 años’. Eso no me atrae en lo mínimo. Hay una parte evidente de nostalgia, pero no quiero quedarme en eso. No quiero hacer un tour de nostalgia, porque también hay público de La Barranca que afortunadamente nos empezó a escuchar cuando estos discos ya existían y queremos tener una relación con la generación actual con base en esas canciones de hace 20 años. Queremos compartir con el público que acogió estos discos hace 20 años, pero también con el actual”.

El cantante y guitarrista espera numeroso aforo el viernes 8 de septiembre en el Metropólitan.