En septiembre, cuando se inicie el periodo ordinario de sesiones, el presidente Enrique Peña Nieto enviará como iniciativa preferente la reforma de diversas disposiciones de la legislación ambiental a fin de que en terrenos forestales no se otorguen apoyos o incentivos para llevar a cabo actividades que aumenten la frontera agrícola en detrimento de los bosques y selvas del país.

Se trata del anteproyecto de la iniciativa de reformas a las leyes General del Equilibrio Ecológico y Protección al Ambiente (Lgeepa) y de Desarrollo Forestal Sustentable en materia de desarrollo rural. El documento plantea que las secretarías de Medio Ambiente (Semarnat) y de Agricultura (Sagarpa) con el uso de herramientas tecnológicas y el intercambio de información deberán identificar terrenos o predios que no puedan ser sujetos a apoyos gubernamentales que incentiven la pérdida de la cobertura forestal.

Para ello se propone reformar y adicionar el artículo 105 de la Lgeepa, con el fin de instaurar que los programas de apoyo federales no incentiven actividades o proyectos en zonas deforestadas o que puedan propiciar el cambio de uso de suelo de terrenos forestales, así como reformas y adiciones a los artículos 27 y 117 en la Ley General de Desarrollo Forestal Sustentable con el fin de que no se otorguen apoyos para la realización de actividades agropecuarias en terrenos incendiados.

Se plantea un régimen transitorio de tres meses para que las dependencias pongan en operación el instrumento de información para la identificación de los predios agropecuarios y terrenos forestales. Lo anterior, para que en las reglas de operación del ejercicio fiscal 2018 la Comisión Nacional Forestal, dependiente de la Semarnat, y la Sagarpa ya no consideren la entrega de apoyos a terrenos con esas características.

El documento, divulgado por la Semarnat en su página de Internet, señala que bosques y selvas son fuente de servicios ambientales como soporte en el ciclo de nutrientes, formación de suelo, polinización, control biológico, provisión de materias primas, captación de agua, conservación de la biodiversidad, elementos fundamentales para desarrollar una productividad agrícola sustentable.

Indica que la estabilización de la frontera forestal conserva los servicios ambientales, evita la deforestación y se obtienen beneficios directos para los productores agropecuarios, fundamentales para el crecimiento económico del país.

El jefe del Ejecutivo tiene la facultad de enviar dos iniciativas preferentes al Congreso, que deberán ser discutidas y votadas por el pleno de la cámara de origen en un plazo máximo de 31 días naturales.

La anterior iniciativa preferente que envió el presidente Peña Nieto fue al Senado, el pasado primero de febrero, con las reformas a la Ley General de Educación para revalidar los estudios de mexicanos en el exterior en beneficio de los llamados dreamers.