El Niño Verde amaga con separarse de su principal aliado, explican priístas
encareceruna alianza en la presidencial de 2018
Lunes 31 de julio de 2017, p. 16
Desde 2000, cuando participó en la alianza que llevó a Vicente Fox a la Presidencia, el Partido Verde Ecologista de México (PVEM) ha dependido de acuerdos con otras instituciones políticas para mantener porcentajes de entre 5 y 6 por ciento de la votación nacional.
Teniendo como mecanismo de presión la designación del candidato a gobernador de Chiapas, el grupo que domina el partido, con Jorge Emilio González Martínez, El Niño Verde, a la cabeza, amaga con separarse de su principal aliado para tratar –explican priístas– de encarecer
una eventual alianza para 2018.
El primer candidato presidencial del PVEM, en 1994, fue Jorge González Torres, quien sólo obtuvo 327 mil 313 votos (0.93 por ciento). Y si bien en 2005 eligió a Bernardo de la Garza, la dirigencia lo obligó a declinar en favor de Roberto Madrazo, una vez que el tricolor se comprometió a garantizarle un piso mínimo de 6 por ciento de la votación nacional, para asegurarse diputados y senadores.
El Partido Verde, al que siempre se ha señalado una visión mercantilista de la política, se alió primero con Vicente Fox, en 2000, cuando al firmar la Alianza por el Cambio, el Partido Acción Nacional –que ganó la Presidencia con 42.52 por ciento– le prometió 5 por ciento del resultado nacional.
La historia contada por priístas y verdes refiere que Fox les prometió la Secretaría del Medio Ambiente en el gabinetazo, pero el entonces presidente designó a Víctor Lichtinger. El PVEM obtuvo esa dependencia ya en el actual sexenio, primero con Juan José Guerra Abud, quien fue coordinador de la bancada, y después con Rafael Pacchiano, también diputado con él en la 61 legislatura.
Dirigentes del Partido Revolucionario Institucional (PRI) consultados sobre la pretensión del PVEM de ir con un candidato presidencial, que rompería la alianza de dos campañas con el tricolor, señalan que se trata de una nueva estrategia de El Niño Verde para obtener mayores ventajas en la elección de 2018.
La postura de González Martínez, quien actúa como dirigente del partido porque la presidencia está vacante, se inició con la designación del candidato verde en Chiapas, independiente del PRI.
Aunque, indicaron, esa estrategia iría en contra de la del gobernador Manuel Velasco Coello, que estaría de acuerdo con una alianza. No obstante, señalaron, la postulación de Óscar Gurría Penagos como candidato de Morena constituye un elemento a considerar en la decisión final.
Además de González Martínez, los personajes visibles en el PRI que promueven la ruptura son los senadores Pablo Escudero y Carlos Puente, ex colaborador de Fox e integrante de la telebancada.
Escudero ya destapó a Puente como precandidato presidencial del PVEM, pero los priístas insisten en que es una estratagema de El Niño Verde. La semana pasada el presidente del PRI, Enrique Ochoa Reza, refirió que se reuniría con Puente e informaría el resultado del encuentro, lo cual no ocurrió.
En 2006, de los 2 millones 572 mil 352 votos para la alianza, al PVEM se le reconocieron 6.50 por ciento, mientras en 2012, 6.1 por ciento.
Desde la presidencia de Fox, el PRI ha dependido del PVEM para las votaciones en el Congreso. En el actual sexenio, sobre todo para aprobar reformas como la energética, la laboral y en materia educativa.
A cambio, el tricolor ha avalado promesas de campaña del Verde como los vales de medicinas, prohibir el uso de animales en circos y, recientemente, mantener la explotación de delfines hasta por 60 años más.