Neli Delgado fue enganchada por un hombre que la enamoró
En el refugio de víctimas de trata entendí que todo era mentira
Domingo 30 de julio de 2017, p. 10
En 2010, Neli Delgado conoció en Cuitláhuac, Veracruz, al que sería su tratante. Álex, como dijo llamarse, la enamoró en poco más de 15 días. Se acercó a ella en un parque y después de platicar intercambiaron teléfonos. Luego buscó a la joven de 19 años sin parar: Me mandaba mensaje diario
, y le pidió que fuera su novia. Quería que todo fuera rápido
.
Álex, quien le hizo creer que tenía 25 años, cuando en realidad tenía 10 más, pidió a Neli irse a vivir con él a Puebla. Tras discutir ante la negativa de ella, la convenció al decirle que era la mujer que había traído paz, amor y felicidad a su vida
.
En Puebla los primeros días la trató muy bien, pero después empezó a hablar de prostitución
y de la cantidad de dinero que puede obtenerse con esa actividad. Al principio la joven delgada, de tez morena y estatura media no prestaba atención a sus historias, hasta que le dijo: Así como yo doy la vida por ti, tú la tienes que dar por mí, así que vas a trabajar de sexoservidora en la Ciudad de México
. Desde ese momento la relación cambió: él la agredía sicológicamente, la hacía sentir menos
y la amenazó.
Fue así como aceptó viajar a la capital del país con una supuesta amiga de él, quien se encargó de llevarla al callejón de Santo Tomás, ubicado en la zona de La Merced, donde se prostituyó durante poco más de un mes.
En ese lugar trabajaba 12 horas y estaba, en ocasiones, con más de 30 hombres. Al principio, dijo, no lo podía creer, se me salían las lágrimas
. Neli recordó que las cuarterías eran horribles
, insalubres y sólo estaban separadas por una cortina. Entregaba al tratante la mayor parte del dinero que cobraba.
Neli pudo salir de ahí por un operativo realizado en la zona. Fue retenida junto con otras jovencitas; sin embargo, la mayoría fueron liberadas después de escuchar el discurso que están obligadas a decir: Estamos aquí porque queremos
.
A Neli no la dejaron ir porque sospechaban que era extranjera, así que la enviaron a la Fundación Camino a Casa mientras investigaban su caso. Después de 15 días en ese refugio, entendió lo que sucedía: “Me dijeron que yo tenía tratante, que explotaba a otras dos mujeres, a quienes conocía como las esposas de un supuesto amigo que nunca apareció.
Ahí me di cuenta de la realidad, de que todo había sido una mentira, que lo que me había dicho no era cierto, que jamás iba a cumplir alguna de las metas: que quería juntar dinero para poner un hotel y una red de taquerías
. Álex, quien en realidad se llama Arturo, se encuentra sentenciado a 13 años y nueve meses en prisión.
En la Fundación Camino a Casa, refugio para víctimas de trata, Neli llevó un proceso de recuperación y terminó la licenciatura en administración.
Las hijas de Angélica Martínez, Cecilia González y Carolina Manzano están desaparecidas desde hace más de un año. Las tres, integrantes de la Red de Madres Buscando a sus Hijas e Hijos, no descartan que las jovencitas sean víctimas de trata.
A Andrea Michel Dávila Martínez, de 18 años, hija de Angélica, se la llevaron de Ciudad Cuauhtémoc, Ecatepec. “Para mí que alguien la enganchó”, asegura.
A Amairany Robledo, de 22 años, hija de Cecila, la vieron por última vez el 1º de agosto de 2012. Cecilia relata que su hija le comentó que un muchacho
que manejaba un taxi cerca de Guelatao la pretendía, pero Amairany le dejó en claro que no quería nada con él. La madre cree que podría ser una línea de investigación.
Éricka de la Piedra, de 27 años, hija de Carolina, no regresó a su casa después de citarse con su novio en una plaza comercial cerca de avenida Cuauhtémoc, en la capital del país. Ya pasaron cinco años de aquella vez.