Lausana.

Ángel María Villar, suspendido un año como presidente de la Federación Española de Futbol (RFEF) y en prisión provisio- nal acusado de corrupción, dimitió de sus cargos como vicepresidente de la FIFA y de la UEFA, anunciaron ambas instancias.

Villar abandona los primeros planos del futbol mundial tras ascender hasta el segundo puesto de más autoridad en la FIFA, como el funcionario de mayor peso entre los ocho vicepresidentes que están por debajo de Gianni Infantino.

A pesar de que Infantino aseguró el año pasado que la crisis de corrupción en la FIFA había terminado, dos de sus colegas en el consejo rector renunciaron en los tres meses recientes bajo sospechas de conducta inapropiada.

Villar fue arrestado la semana pasada en España, junto con su hijo Gorka y otros dos funcionarios del futbol en ese país, todos acusados de administración desleal, malversación de fondos, corrupción y falsificación de documentos. Un juez de la Audiencia Nacional negó el derecho a fianza a los Villar, por lo que permanecerán tras las rejas mientras aguardan por su juicio.

La máxima autoridad del deporte en España, el Consejo Superior de Deportes (CSD), decidió suspender el martes a Villar por un año. El tesorero del ente, Juan Luis Larrea, asumió el miércoles como presidente interino, ya que el vicepresidente de la federación, Juan Padrón, también se encuentra detenido.

Villar fue miembro del comité ejecutivo de la UEFA durante 25 años y entre fines de 2015 y 2016 presidió temporalmente el organismo ante la suspensión del francés Michel Platini. En FIFA, formaba parte del ejecutivo desde 1998. Además, en mayo fue reelegido por octava ocasión como presidente de la RFEF después de 29 años en el cargo.