Querétaro, Qro.

Con el uso de la fuerza pública, el gobierno municipal capitalino, a cargo del panista Marcos Aguilar Vega, inició los trabajos de remoción del adoquín sobre la calle Madero, del centro histórico, donde manifestantes mantenían un plantón en contra de la obra por considerarla innecesaria.

Según testimonios, desde hace dos semanas, alrededor de 40 personas se instalaron en plantón sobre la calle Madero en la intersección con avenida Ocampo para impedir el cambio de adoquín, toda vez que aún está en buen estado.

Cerca de las cinco horas de ayer, 40 policías formaron un cordón humano para abrir paso a la maquinaria pesada que iba levantando el adoquín de la calle, al tiempo que los elementos replegaban a los manifestantes a empujones.

El secretario general de Gobierno municipal, Manuel Velázquez Pegueros, informó en un comunicado que se procedió a retirar a las personas que se encontraban impidiendo la continuación de las obras urbanas que ahí se ejecutan.

Dos de los manifestantes fueron detenidos acusados de violación al artículo 282 del Código Penal de la entidad, que penaliza el delito contra el servicio público cometido por particulares con sanciones que van de tres meses a un año de prisión y 20 días de multa. Asimismo, se les acusa de la falta administrativa de resistencia de particulares, ques se puede penalizar con 36 horas de arresto o el pago de cien salarios mínimos (ocho mil pesos).

Gonzalo Ruiz Posada, inconforme, señaló en entrevista que en un operativo impresionante, los agentes suspendieron la circulación sobre la calle Madero a la altura de Guerrero y dieron paso a las máquinas para destruir el adoquín desde la intersección con Ocampo hacia el poniente.

Precisó que los manifestantes se oponen a esa obra porque sólo se trata de la sustitución del adoquín de cantera, que a su parecer está en buen estado, por otro de loseta que no se sabe de dónde lo están trayendo.

Esta administración no sabe darle mantenimiento a la ciudad, se deterioran colonias aledañas y lo que está bien hecho lo destruye. Ésa es la terrible paradoja de nuestras autoridades, manifestó Ruiz Posada.