El acceso a la cultura y a la recreación es uno de los indicadores con mayor rezago en el Índice de Bienestar Social (IBS) de la Ciudad de México. En promedio, sólo 30 por ciento de la población capitalina dice tener siempre o a menudo tiempo libre durante el día, según el estudio realizado por el Consejo de Evaluación del Desarrollo Social (Evalúa) local.

Señala que los habitantes de la ciudad asisten en promedio a cinco eventos culturales cada seis meses, aunque con grandes disparidades entre las distintas delegaciones, pues mientras en Benito Juárez los habitantes dijeron ir hasta en 11 ocasiones en el periodo referido, en Cuajimalpa y Tláhuac mencionaron haberlo hecho sólo una vez.

Lo mismo sucede en cuanto al tiempo libre, toda vez que en Cuajimalpa, 42 por ciento de los vecinos entrevistados para la realización del IBS manifestaron tenerlo siempre o a menudo, situación que en Milpa Alta sólo alcanza 14 por ciento de la población.

Los datos del IBS, presentado en mayo pasado y realizado con base en 11 categorías, como educación, empleo, salud, ingreso y alimentación, entre otras, señalan que las delegaciones con mayor acceso a eventos culturales –además de la ya mencionada– son Álvaro Obregón, Iztapalapa, Cuauhtémoc y Azcapotzalco, pues sus habitantes asisten a éstos entre seis y ocho ocasiones cada seis meses; en tanto que los de Iztacalco y Magdalena Contreras reportaron acudir a dichas actividades no más de dos veces en el mismo periodo.

Por otra parte, en Iztacalco, Benito Juárez, Azcapotzalco y Magdalena Contreras, alrededor del 40 por ciento de sus ciudadanos manifestaron tener tiempo libre durante el día, sólo por debajo de Cuajimalpa; porcentaje que se reduce a la mitad en Tláhuac y Xochimilco.

Otro indicador que mostró rezagos en el IBS fue la calidad del entorno físico en el que viven los capitalinos, es decir, calles iluminadas y sin basura, espacios con áreas verdes, pasos peatonales y semáforos, en el que, en promedio, sólo 19 por ciento dijo que son adecuados.

También en este rubro la delegación Benito Juárez registró los niveles más altos, con 40 por ciento de habitantes que dijeron estar a gusto con su entorno; respuesta que en Azcapotzalco e Iztapalapa sólo dieron 8 y 9 por ciento, respectivamente.

En las conclusiones del IBS se señala que si bien indicadores como el de educación reportan una cobertura máxima de 98 por ciento y mínima de 91, se debe tomar en cuenta que todos los que se utilizaron para hacer la medición mantienen una relación de dependencia e incluso pueden formar círculos virtuosos, pues, por ejemplo, aumentar el nivel educativo de una población será uno de los aspectos determinantes para acceder a un mejor ingreso en el futuro.