El plantel regresó a su país luego de ganar en Rusia
Martes 4 de julio de 2017, p. a10
Fráncfort.
La selección alemana de futbol hizo vibrar de nuevo a sus aficionados al regresar de Rusia ayer con un nuevo título tras proclamarse campeona de la Copa Confederaciones 2017 ante Chile.
El conjunto dirigido por Joachim Löw aterrizó en esta ciudad antes de lo previsto. El primero en bajar del avión, con el trofeo dorado en la mano, fue el capitán Julian Draxler. A continuación descendieron sus otros compañeros, quienes posaron brevemente en la escalerilla de la aeronave para ser retratados por la prensa.
Alemania, campeona del Mundial de Brasil de 2014, revalidó su título de mejor conjunto internacional al vencer 1-0 a Chile en la final de la Copa Confederaciones. El logro no fue menor, dado que la Mannschaft redondeó un torneo soñado con una plantilla muy joven, en la que figuraban numerosas caras nuevas. El título conseguido se suma a la victoria del combinado Sub-21 el viernes en la Eurocopa de Polonia ante España.
Dos hitos que demuestran que el futbol teutón no sólo disfruta de un gran presente, sino también de un enorme futuro.
En Rusia no estuvieron Manuel Neuer, Thomas Müller o Toni Kroos. Sólo asistieron tres de los jugadores que se consagraron campeones en Brasil 2014: Julian Draxler, Shkodran Mustafi y Matthias Ginter. Ninguno había sido protagonista principal en tierras brasileñas.
El joven plantel comenzará ahora sus vacaciones de verano. Tras el descanso, el conjunto nacional deberá afrontar nuevos encuentros para la clasificación del Mundial de Rusia, en los que se espera que ya estén presentes los rostros habituales. Alemania cuenta con todas las posibilidades de tener un lugar reservado en el Mundial, después de haber vencido en la República Checa y de imponerse a Noruega en jornadas recientes y liderar con comodidad su grupo clasificatorio.