Entre acusaciones de querer convertir al PRD en un partido sumiso al PAN, fue convocado con carácter de urgente su Comité Ejecutivo Nacional para este domingo; el propósito es aterrizar la construcción de un frente amplio opositor en 2018 con el blanquiazul.

Por la mañana, René Bejarano, líder de Izquierda Democrática Nacional (IDN), acusó que las corrientes Nueva Izquierda, Alternativa Democrática Nacional y Vanguardia Progresista analizan ir con un candidato presidencial panista.

Sin embargo, integrantes de esas expresiones comentaron su disposición a trabajar por un frente amplio y democrático. Se comentó que en la mesa de negociación entre corrientes se mencionaron cuatro nombres como propuesta de candidatos ciudadanos: el ex rector de la UNAM, Juan Ramón de la Fuente; el gobernador de Chihuahua, Javier Corral; el jefe de Gobierno de la Ciudad de México, Miguel Ángel Mancera, y la periodista Carmen Aristegui.

Ayer por la mañana dirigentes de distintas expresiones –excepto de IDN y Militantes de Izquierda (MIZ)– se reunieron con Mancera para intercambiar puntos de vista sobre la construcción del frente amplio.

Se acordó enviar una carta a todos los actores políticos, incluido Andrés Manuel López Obrador, presidente de Morena, así como a sindicatos, académicos y organizaciones sociales con un llamado a sumarse. En tanto, las corrientes perredistas anoche seguían negociando.

Al mediodía de ayer, Carlos Sotelo, de MIZ, afirmó que los grupos hegemónicos del PRD llevan los tiempos y los intereses del PAN. Tan obvios y tan con la derecha, después de que convocaron al CEN para empatar la ruta que ya resolvió el PAN para 2018.

Previamente, Bejarano, advirtió que la alianza con el PAN significaría la puntilla para el partido del sol azteca en caso de impulsar a un candidato blanquiazul; apoyar a Margarita Zavala, Rafael Moreno Valle o Ricardo Anaya convertiría al PRD en un nuevo Partido Verde, dijo.

Consideró como única posibilidad de llegar a un acuerdo con el panismo que el candidato fuera un personaje ciudadano con respaldo social, como De la Fuente.

A pregunta expresa, mencionó que en el caso de Mancera, habría que ver su nivel de aceptación o rechazo.

Bejarano no descartó la posibilidad de que el PRD pudiera llegar a un acuerdo de unidad con Morena, pero no en las condiciones que pretende imponer López Obrador, que busca se sume el perredismo pero de manera acrítica, con un trato indigno y de sumisión.