Dirigentes de la Coordinadora Nacional de Trabajadores de la Educación (CNTE) condenaron el ataque contra los normalistas de Tiripetío, Michoacán, y exigieron el esclarecimiento de los hechos y la sanción a los responsables, pero también que se dé a conocer quién dio la orden de disparar contra los estudiantes. Se debe esclarecer la responsabilidad del gobernador, Silvano Aureoles Conejo, quien ha optado por la agresión, antes que el diálogo.

El gobierno federal, afirmaron, mantiene una política de desprecio hacia el normalismo desde hace décadas, pero hoy confirmamos que existe una política de represión sistemática que no sólo es ejercida por las fuerzas policiacas federales, sino también por las estatales.

Luego que, en un enfrentamiento con elementos policiacos del estado, un estudiante normalista recibió un disparo en el rostro, Enrique Enríquez Ibarra, secretario general de la sección 9 de Ciudad de México, afirmó que esta ola de violencia nos toca a todos los sectores en resistencia, no sólo a normalistas y maestros, (sino también) a luchadores sociales, defensores de derechos humanos, periodistas, y todo aquel que se oponga al régimen.