Al menos 6 mil personas de diferentes municipios de Chiapas realizaron ayer una marcha-peregrinación en Tuxtla Gutiérrez en rechazo a la explotación de hidrocarburos en el estado.

La protesta, organizada por el Movimiento Indígena del Pueblo Creyente Zoque en Defensa de la Vida y la Tierra, partió en vehículos de Chicoasén, a 35 kilómetros de la capital del estado, y se sumó a una marcha de maestros de la Coordinadora Nacional de Trabajadores de la Educación (CNTE), normalistas, miembros de diferentes organizaciones y colectivos.

Una vez reunidos, caminaron del poniente al centro de Tuxtla Gutiérrez para finalizar con una misa oficiada por el sacerdote indígena Marcelo Pérez Pérez, párroco del municipio de Simojovel.

La movilización en favor del agua, la tierra y la vida, encabezada por sacerdotes de la arquidiócesis de Tuxtla Gutiérrez y por Pérez Pérez, reunió a pobladores de los municipios zoques de Rayón, Mezcalapa, Francisco León, Tecpatán, Chiapilla, Ixtacomitán, San Fernando, Chicoasén, Copainala, Solosuchiapa y Ixtapangajoya.

El religioso tzotzil dijo en entrevista que los católicos de Simojovel se solidarizaron con los habitantes del pueblo zoque porque su territorio está en peligro.

Agregó: No podemos quedarnos al margen, porque lo que está en juego es la vida humana; al destruir a la madre tierra se destruye la vida, y si es así la Iglesia tiene que levantar la voz porque va en contra del quinto mandamiento: no matarás.

Juan Guerrero Hernández, uno de los dirigentes del Movimiento de Pueblos Originarios en Resistencia, afirmó que en agosto pasado la Secretaría de Energía anunció la licitación de la ronda 2.2, para concesionar pozos de extracción en 12 bloques, dos de los cuales afectarán a Chiapas.

Precisó que el bloque 10 tendrá impacto en 42 mil 600 hectáreas de los municipios de Tecpatán, Francisco León y Ostuacán, en el norte de la entidad, de donde se prevé extraer aceite superligero y gas húmedo. El bloque 11, dijo, afectaría 41 mil 900 hectáreas en Chapultenango, Ixtacomitán, Ixtapangajoya, Pichucalco, Solosuchiapa y Sunuapa, también en el norte.

En Puebla, autoridades federales y estatales realizaron ayer una operación en cinco gasolineras del estado contra la venta de combustible robado de ductos de Petróleos Mexicanos (Pemex).

En la inspección participaron elementos del Ejército Mexicano, la Unidad de Inteligencia Financiera de la Secretaría de Hacienda y Crédito Público, la Procuraduría General de la República, personal de Pemex y la policía del estado.

Las inspecciones se realizaron en dos estaciones de servicio de la capital poblana y en sendos establecimientos en los municipios de Tepexi de Rodríguez, Palmar de Bravo y Tecamachalco, situados en la zona conocida como el triángulo rojo, por la alta incidencia de robo de combustibles a Pemex.