Llega a 7%; encarece crédito para empresas y personas; prevé menor inflación
Considera el titular de Hacienda que el país está cerca del final del ciclo de aumento
de réditos
Viernes 23 de junio de 2017, p. 19
Las condiciones del mercado de crédito fueron endurecidas ayer nuevamente por el Banco de México (BdeM). El organismo determinó elevar un cuarto de punto su tasa de referencia, a 7 por ciento anual. Fue el séptimo incremento consecutivo y el décimo desde que inició el ciclo alcista, en diciembre de 2015. Con la medida, que encarece el costo del crédito para empresas y personas, el banco central busca anclar
la expectativa de que el repunte de la inflación comenzará a revertir hacia finales de este año, así como mantener el atractivo para las cuantiosas inversiones financieras que llegaron al país en los años recientes.
La decisión de elevar la tasa de referencia no fue unánime. Uno de los miembros de la junta de gobierno del banco central –integrada por el gobernador, Agustín Carstens, y cuatro subgobernadores– votó por mantenerla sin cambio. El movimiento de alza no afecta a los préstamos ya contratados para la compra de vivienda, auto o nómina, que son negociados a un rédito fijo, pero sí determinará el costo de los nuevos.
Al incidir sobre el costo del financiamiento de empresas y personas, el aumento de la tasa de interés de referencia del banco central actúa sobre las decisiones de inversión y consumo y, en esa medida, contiene presiones inflacionarias.
El incremento de un cuarto de punto era esperado por los analistas. La novedad fue que el banco central expuso que en el nivel actual de 7 por ciento, la tasa de referencia es congruente
con un nivel de inflación en torno a 3 por ciento, que es el objetivo permanente de la institución. El apunte deja entrever el fin del actual ciclo alcista de la tasa, iniciado en diciembre de 2015, cuando se ubicaba en 3 por ciento.
En el comunicado de este jueves, el Banco de México explicó que para tomar la decisión de elevar en esta ocasión la tasa de referencia tomó en consideración que la semana pasada el Banco de la Reserva Federal (Fed) de Estados Unidos también elevó sus réditos. Así, se mantiene el diferencial entre los rendimientos que se ofrece a las inversiones financieras aquí, respecto de los de Estados Unidos.
Otra de las consideraciones fue mantener anclada
la expectativa de inflación, con el argumento de que el incremento en los precios ocurrido a partir de enero comenzará a revertir hacia finales de año y regresará a niveles en torno al objetivo de 3 por ciento a finales de 2018.
Hacia adelante, la junta de gobierno seguirá muy de cerca la evolución de todos los determinantes de la inflación y sus expectativas de mediano y largo plazos, en especial del traspaso potencial de las variaciones del tipo de cambio y de los incrementos en los precios de los energéticos al resto de los precios, así como a la evolución de la brecha del producto (que es la diferencia entre el crecimiento potencial de la economía y el registrado). También evaluará la posición monetaria relativa entre México y Estados Unidos
, expuso.
Un mensaje muy claro del banco central fue que el incremento de la tasa de interés de este jueves fue el último de este ciclo, comentó Citibanamex. Mientras, Invex apuntó que la reciente desaceleración de la inflación, la expectativa de que se disipen parte de las presiones transitorias que provocaron el repunte de precios al inicio de año –como el alza del precio de gasolinas y el efecto de la depreciación de peso– y la reciente apreciación de la moneda mexicana respecto del dólar favorecen el final del ciclo restrictivo del Banco de México.
Dos aumentos más
México está probablemente cerca del final de su ciclo de aumentos de tasas de interés, además de que podría bajar los costos de su deuda tan pronto como en los últimos meses del año, de acuerdo con José Antonio Meade, secretario de Hacienda y Crédito Público.
Sin embargo, en entrevista con la agencia de información Bloomberg, Meade indicó que es posible que el Banco de México suba las tasas de interés dos veces más antes de que comience a relajar esa posición, al tiempo que la inflación se desacelera a menos de 4 por ciento a finales de año o principio de 2018.
El titular de Hacienda explicó que la inflación actual, de más de 6 por ciento, se debe a un aumento en los precios de la gasolina y a una caída en el peso al comienzo del año, por lo que no durará.
Bloomberg indicó que la presión sobre el BdeM disminuyó después de que el peso se revaluara 18 por ciento desde la toma de posesión del presidente Donald Trump, debido a que el gobierno estadunidense parece dispuesto a negociar un Tratado de Libre Comercio benéfico para ambas naciones. En cuanto a la política monetaria, las expectativas de inflación están bien ancladas y lo que los mercados están viendo es potencialmente otro par de aumentos este año
, señaló Meade.
El titular de Hacienda añadió que los mercados empiezan a predecir que la tasa de interés podría comenzar al término de este año o al principio del próximo, y creo que tienen razón
. Una política monetaria más relajada debería ayudar a la economía a mejorar en los próximos años, dijo Meade.
Para 2019 es probable que el crecimiento supere al de Estados Unidos y Canadá, en medio de una mejor perspectiva mundial, la producción industrial estadunidense y la desaceleración de la inflación, acotó el funcionario.
Estamos en el final de nuestro proceso de consolidación fiscal. Muchas cosas que ahora son un freno para el crecimiento en México deberían convertirse en un impulso para 2018, 2019 y 2020
, enfatizó Meade.
Recomienda Condusef a familias cuidado con endeudamiento
Ante el aumento a las tasas de interés de refencia, que este jueves se ubicaron en 7 por ciento, el presidente de la Comisión Nacional para la Protección y Defensa de los Usuarios de Servicios Financieros (Condusef), Mario di Costanzo, recomendó cuidar el endeudamiento de las familias y contratar préstamos que realmente sean necesarios.
Hoy el dinero es más caro y las tasas de interés de los productos financieros pueden aumentar hasta 1.5 por ciento en los próximos meses, apuntó el funcionario.
La recomendación es “cuidar el endeudamiento. Si vamos a contratar un crédito al consumo que éste sea planeado, que realmente se necesite. Si un usuario tiene un crédito entonces tratar de ser totaleros, pues si se paga el mínimo, con el aumento de tasas, tardaremos más tiempo” en liquidar el financiamiento, apuntó Di Costanzo.
Estimó que diversos productos crediticios aumentarán entre uno y 1.5 por ciento, como los créditos al consumo o de nómina. En cambio, dijo, el préstamo hipotecario puede reaccionar más lento al impacto del alza en las tasas de referencia de este jueves del Banco de México.