Es odio contra los estudiantes indocumentados, afirma la activista Karina Ruiz
Miércoles 21 de junio de 2017, p. 39
Phoenix.
La corte de apelaciones de Arizona dictaminó ayer que los indocumentados protegidos por el Programa de Acción Diferida para Llegados en la Infancia (DACA, por sus siglas en inglés) no son elegibles para pagar bajas colegiaturas como el resto de los residentes del estado.
Resolvió que es incorrecta
la decisión de un juez estatal, quien en 2015 estableció que los estudiantes indocumentados conocidos como dreamers podían ser considerados legalmente presentes en Estados Unidos y, por tanto, calificar para el beneficio de recibir colegiaturas baratas, reservadas para los residentes en el estado.
El juez Kenton Jones, magistrado presidente de la corte de apelaciones, dijo que, en opinión de la mayoría, el DACA no confiere estatus de residente legal en Estados Unidos.
Jones señaló que la ley federal de inmigración permite a cada estado decidir los provechos opcionales para los beneficiarios del DACA y que la norma de Arizona impide otorgar a éstos las colegiaturas de residentes.
La ley, votada en 2006 como Proposición 300, prohíbe los beneficios públicos para cualquier persona que viva en Arizona sin estatus migratorio legal.
En consecuencia, concluimos que los beneficiarios del DACA no son automáticamente elegibles para los provechos de colegiaturas de residentes en el estado
, indicó.
La decisión de la Corte coloca a Arizona en la dirección contraria a la que han seguido otras entidades del país, incluyendo estados republicanos como Oklahoma, Texas, Tenesí y Nebraska, que han otorgado colegiaturas baratas de residentes a los indocumentados.
Tenesí se convirtió recientemente en el estado número 21 en conceder matrículas de residente a los estudiantes indocumentados, luego de que los legisladores republicanos y demócratas acordaran que no tenía sentido castigar a los alumnos traídos ilegalmente a Estados Unidos por sus padres.
Los indocumentados beneficiarios del DACA habían tenido desde 2015 acceso a colegiaturas como residentes en el estado en las tres universidades públicas de la entidad, incluyendo la Universidad Estatal, la Universidad de Arizona y la Universidad del Norte.
Las colegiaturas son sustancialmente menores a las que pagan los estudiantes no residentes. Por ejemplo, en la Universidad Estatal de Arizona (ASU), para un estudiante de tiempo completo, es de 10 mil 640 dólares al año, en comparación con los 26 mil 400 para los alumnos no residentes.
Todo esto es odio
, aseveró Karina Ruiz, presidenta de la Arizona Dream Act Coalition, grupo que aboga por los estudiantes indocumentados. No hay nada más. No hay ninguna razón para que el estado esté luchando contra estudiantes que quieren recibir educación. Esto está mal
, subrayó.
Ruiz manifestó que teme que muchos estudiantes del DACA se verán obligados a abandonar los colegios comunitarios o las universidades estatales, si el gobierno se impone y se ven obligados a pagar las colegiaturas como si no fueran residentes del estado.