Acto simbólico de AI en conmemoración del Día Mundial del Refugiado
El año pasado México recibió 8 mil 878 solicitudes, 91 por ciento de centroamericanos
Miércoles 21 de junio de 2017, p. 9
‘‘Destruir un muro para construir un hogar’’. Bajo esa premisa Amnistía Internacional (AI) sección México realizó la tarde de ayer un acto simbólico con el fin de concientizar a la ciudadanía sobre la importancia de que el país conceda garantías a miles de personas que cada año piden asilo o refugio, pues se ven obligadas por diferentes circunstancias a dejar sus lugares de origen.
Datos de la organización indican que el año pasado hubo 8 mil 878 solicitudes de asilo en México, de las cuales 91 por ciento fueron centroamericanos, quienes ya no buscan el llamado sueño americano, sino huyen de sus naciones por la violencia.
Además, de 2011 a 2016, las solicitudes de refugio de personas provenientes de Centroamérica se incrementaron hasta en 179 por ciento.
En el contexto del Día Mundial del Refugiado, que se conmemoró ayer, AI levantó un muro a un costado de la Alameda Central de Ciudad de México, con la idea de que los paseantes tomaran una de las piedras de éste y en ellas escribieran un mensaje de solidaridad para los migrantes y refugiados a fin de que México sea visto como un país que les da la bienvenida.
Madeleine Penman, investigadora para México de AI, recordó que en el mundo hay alrededor de 22 millones de personas refugiadas y dos de las zonas de mayor relevancia son Estados Unidos y México. Indicó que aunque el muro anunciado por el presidente Donald Trump aún es un proyecto, hay un ‘‘muro invisible’’, que son las políticas gubernamentales de México para regresar a decenas de miles de personas a sus lugares de origen, exponiéndolos a graves peligros por la violencia que se da en aquellos países.
Eso, dijo, vulnera el derecho internacional en el que se enmarca el principio de no devolución. Además, otra de las violaciones a garantías fundamentales, subrayó, es que las autoridades migratorias mexicanas detienen y encarcelan a miles de personas solicitantes de asilo, y muchos de ellos son menores de edad. "Pese a que la propia ley mexicana lo prohíbe (encarcelar menores), en 2016 el gobierno mexicano detuvo a más de 40 mil niños en esta situación’’, denunció.
Diana Sánchez, encargada de campañas para México de Amnistía, indicó que la actividad de ayer intentó hacer ver a los ciudadanos que más allá del muro de Trump, los muros se dan por las restricciones y obstáculos que enfrentan los solicitantes de asilo.