En esa modalidad, uno de cada 4 pesos de préstamos al consumo otorgados por la banca
Al cierre de 2016, el financiamiento por esa vía alcanzó $196 mil 642 millones, 24.4% del rubro
Miércoles 21 de junio de 2017, p. 21
La morosidad en los créditos que obtienen los trabajadores con el pago de nómina como garantía ha sido el único de todos los préstamos destinados al consumo con una tendencia al alza, advirtió este martes el Banco de México.
Uno de cada cuatro pesos de préstamos al consumo otorgados por la banca comercial es mediante el llamado crédito de nómina
, el tipo de financiamiento con menor riesgo de impago, expuso el banco central.
Estos créditos son otorgados a trabajadores cuyo salario es abonado a una cuenta de nómina de alguna institución financiera. Aun cuando se trata de un préstamo sin garantía física –como puede ser la casa o el auto en los hipotecarios y automotrices, respectivamente– el riesgo para el banco es menor al de otros financiamientos al consumo. En la medida en que el usuario continúe laborando para la misma empresa, recibe el pago de su salario de manera regular en la cuenta, el cual es la fuente para saldar el préstamo, expuso el banco central.
Al cierre del año pasado, el crédito de nómina alcanzó 196 mil 642 millones de pesos, cantidad que representó 24.4 por ciento de la cartera total de crédito al consumo, expuso el Banco de México en el informe Indicadores básicos de créditos de nómina, publicado este martes.
Así, prácticamente uno de cada cuatro pesos que otorga la banca comercial para financiar el consumo de las familias es a través de los préstamos de nómina, el tipo de crédito al consumo con más cartera, después de las tarjetas, expuso el Banco de México.
La morosidad del crédito de nómina ha tenido un repunte en los últimos 12 meses
, advirtió.
Medido de una manera tradicional, es decir, la cartera de crédito vencida como porporción de la cartera total, el índice de morosidad (IMOR) en los créditos de nómina fue equivalente a 4.2 por ciento, de acuerdo con el reporte.
Sin embargo, en el mismo documento el banco central incluye una medición más amplia sobre la morosidad, conocida como IMOR ajustado o IMORA. En este caso, el índice de morosidad es ajustado con las quitas y castigos que realizan las instituciones financieras para limpiar sus balances.
Una vez realizado este ejercicio, el resultado es que 11.8 de cada cien pesos de créditos de nómina otorgados están en mora.
Al ajustar el índice de morosidad con las quitas y castigos que realizan las instituciones, obteniendo así el índice de morosidad ajustado o IMORA, se puede observar que el de créditos de nómina, de 11.8 por ciento, ha sido el único, de los créditos al consumo, que ha presentado una tendencia a la alza
, estableció el reporte.
En diciembre de 2015, el IMOR ajustado en los créditos al consumo era menor a 10 por ciento, menciona el documento.
De acuerdo con la calificadora HRRatings, cuando las condiciones económicas sufren cierto deterioro, el índice de morosidad tiende a incrementar debido a mayor incumplimiento por parte de los deudores. Por tanto pueden darse consecuencias negativas para el banco que presta en términos de liquidez, rentabilidad y capitalización. Mientras mayor sea el monto de cartera vencida, mayor será la necesidad de reservas preventivas y menor la utilidad al final del periodo.
En el reporte, el Banco de México aseguró que la tasa de interés promedio de los créditos de nómina otorgados en 2016 mostró una disminución de 1.10 puntos porcentuales, con respecto de los otorgados en 2015, para situarse en 25.1 por ciento. Es una tasa que, prácticamente, multiplicó por 10 la inflación del año pasado.
Los bancos con una tasa de interés menor al promedio del sistema fueron: Inbursa (23.1 por ciento), BBVA Bancomer (23.3), Banorte (24.4) y HSBC (24.6 por ciento), mencionó.
Arriba del promedio se situaron: Santander (29.2 por ciento), Banco del Bajío (27.3) y Banco Afirme (27.2 por ciento), según el Banco de México.