En 40 años el número de museos se ha duplicado y se debe reflexionar si esta situación contribuye al ejercicio de la diversidad cultural, que derive en terminar con deudas sociales y silencios históricos de los pueblos alrededor del mundo, expresó Nuria Sanz, directora y representante en México de la Organización de las Naciones Unidas para la Educación, la Ciencia y la Cultura (Unesco).

El binomio museo-diversidad cultural en el mundo contemporáneo es el eje de la Reunión Internacional sobre Museos, Antropología y Diálogo entre culturas, a propósito del Humboldt Forum inaugurado hace unos días en el Museo Nacional de las Culturas.

En ese foro participan 40 especialistas en ciencias sociales, antropólogos y museógrafos de Europa, Asia, África y América Latina. El encuentro se inscribe en el Año Dual Alemania-México organizado por la Embajada de Alemania en México, el Goethe-Institut Mexiko y la oficina en México de la Unesco.

El reto, dijo Sanz, es acercarse con valentía a un análisis de la diversidad cultural, que sea con rapidez, porque las prácticas museográficas tienen que abonarle a un mundo que está en cambio vertiginoso; además, se debe ser más intrépidos para meter ese mundo cambiante dentro del museo y darle un significado para contribuir a la producción de un discurso social.

Con esas reflexiones, prosiguió la funcionaria, se busca acabar con los discursos estetizantes que se otorgan a las piezas y entender que cada uno de esos objetos es un nido de relaciones culturales, donde no existen Oriente ni Occidente, sino un discurso civilizatorio que nos ha unido en la historia de la humanidad.

El encuentro culminó el sábado con una serie de recomendaciones, así como una declaratoria sobre el papel de los museos en el siglo XXI, dijo Nuria Sanz.

Foro inscrito en el programa del Año Dual México-Alemania

A la apertura asistieron, además de Sanz, Viktor Elbling, embajador de Alemania en México; Rudolf de Baey, director del Goe-the-Institut Mexiko, y Diego Prieto, titular del Instituto Nacional de Antropología e Historia, quienes coincidieron en la relevancia de analizar cómo los museos sirven de plataforma para asegurar la diversidad de las culturas y especialmente el diálogo entre éstas.

El Año Dual Alemania-México, expresó Viktor Elbling, constituye un ámbito para repensar toda una serie de prácticas mundiales a propósito de la construcción del Foro Humboldt en Berlín, pues se trata de la infraestructura y del programa más ambicioso en el mundo para actualizar el discurso sobre diversidad cultural en clave museográfica en el siglo XXI.

Durante tres días los especialistas nacionales y extranjeros disertaron sobre para qué sirven los museos y sus funciones en la sociedad como espacios de diálogo entre las culturas, la cohesión social y el desarrollo sostenible. Además, de que los museos existen en red y sostienen una especie de intertextualidad con temas y objetivos diferentes.

Las mesas que se desarrollaron fueron Museos y diversidad cultural: historia y contemporaneidad de la relación; Museología y museografía para la diversidad cultural; Las antropologías mundo: el papel de las disciplinas antropológicas en la conceptualización del diálogo contemporáneo entre culturas; Credibilidad y apropiación cultural: nuevas antropologías para antiguas colecciones, y Antropologías de las formas y apropiación del arte.

El sábado, en la clausura de la reunión, se leyó la declaración final que se sustenta en la recomendación relativa a la protección y promoción de museos y colecciones, su diversidad y función en la sociedad, del 17 noviembre de 2015, emitida por la Unesco.